Cada día, millones de niños en todo el mundo enfrentan desafíos que amenazan su salud y su seguridad. Desde conflictos armados hasta crisis sanitarias y pobreza extrema, las infancias más vulnerables suelen ser las primeras en sufrir las consecuencias de las desigualdades globales.
En cuanto a la pobreza alimentaria, las dificultades de niños y adolescentes para acceder a alimentos saludables y servicios básicos ponen en riesgo tanto su desarrollo físico como emocional, aumentando los riesgos para su bienestar a largo plazo.
En medio de este panorama, existen muchas organizaciones internacionales y locales que actúan para intentar cambiar esa realidad.
Entre esas organizaciones, UNICEF en particular ha estado presente durante décadas en los rincones más críticos del planeta. Con participación en más de 190 países, su labor impacta directamente en la vida de millones de niños. Pero, ¿qué es UNICEF y cuál es su función?
De acuerdo a su sitio oficial, UNICEF, el Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia (United Nations International Children’s Emergency Fund, por sus siglas en inglés), es una agencia internacional creada el 11 de diciembre de 1946 con el objetivo de asistir a los niños y madres afectados por los efectos devastadores de la Segunda Guerra Mundial.
Su misión inicial era proporcionar ayuda alimentaria, educativa y médica a los niños sobrevivientes del conflicto, especialmente en Europa.
Desde 1953, UNICEF amplió su alcance y se convirtió en un organismo permanente de las Naciones Unidas. Su labor está centrada en la defensa de los derechos de la infancia, de acuerdo con lo establecido por la Convención sobre los Derechos del Niño. Su enfoque abarca áreas clave como la salud, educación, nutrición, protección y el acceso al agua potable.
La organización también juega un papel fundamental en la inmunización infantil, apoyando a niños desplazados o afectados por conflictos bélicos, y combatiendo la pobreza extrema. Además, se dedica a la erradicación del trabajo infantil, el reclutamiento de menores para conflictos armados y otras formas de explotación, incluidas las agresiones sexuales y el tráfico infantil.
Las acciones de UNICEF son fundamentales para mejorar las condiciones de vida de los niños en situaciones de emergencia y pobreza prolongada, colaborando con gobiernos, organizaciones internacionales y comunidades locales.
Su financiamiento proviene principalmente de donaciones voluntarias de gobiernos, empresas, fundaciones y ciudadanos, lo que le permite mantener su independencia financiera y su capacidad de intervención. Su lema, “Para cada niño”, refleja su compromiso de alcanzar a todos los niños y niñas, independientemente de su contexto.
La organización ha sido reconocida mundialmente por su labor humanitaria, recibiendo galardones como el Premio Nobel de la Paz, en 1965 y el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, en 2006.
Además, figuras públicas de renombre internacional como los músicos Shakira, Ricky Martin y Katy Perry y los actores Emma Watson, Bobby Brown y Danny Glover, entre otros tantos, actúan como embajadores de buena voluntad, contribuyendo a aumentar la visibilidad y apoyo a su causa.
Más allá del accionar de UNICEF en momentos de crisis, el organismo posee programas permanentes que abogan por la construcción de un futuro más justo y seguro para todos los niños del mundo.