El Gobierno ratificó la baja temporal de las retenciones a las exportaciones del agro vigente desde la semana pasada, pese a los reclamos del sector por ampliar la medida y la tensión por las empresas del agro que cayeron en default en las últimas semanas. Ese fue el resultado de la reunión que mantuvo este martes el titular de ARCA, Juan Pazo, y funcionarios del Ministerio de Economía con el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA).
“Los representantes agroindustriales solicitaron la continuidad de la baja de derechos, así como la profundización dado que los estudios del CAA muestran que la continuidad de la reducción de los derechos de exportación enviaría una señal clave de confianza al sector, generando mejores condiciones para la planificación productiva y la adopción de tecnologías”, confirmó la entidad empresaria que preside José Martins en un comunicado.
Pazo estuvo acompañado por el subsecretario de Coordinación de Producción, Santiago Migone y el subsecretario de Mercados de la Secretaria de Agricultura, Ganadería y Pesca, Agustin Tejeda. Mientras que Martins, quien actualmente es el titular de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, asistió junto a Gustavo Idígoras (cerealeras), Diego Cifarelli (molineros), Fernando Rivara (acopio) y Joaquín de Grazia (avícola).
Según la cámara, la medida vigente permitirá exportaciones por 98,1 millones de toneladas, implicando un crecimiento interanual del 11%. Y en términos de valor, US$ 47.954 millones, con un incremento de US$ 1.738 millones respecto a la estimación previa a la medida. Mientras que si se extendiera en el tiempo, permitiría un incremento de entre 4 y 7 millones de toneladas adicionales y una liquidación de entre US$ 1.500 y 2.400 millones.
Los exportadores solicitaron además incluir en la rebaja a los productos derivados bovinos, aviares, nutrición animal y de la pesca. Pero el Gobierno ratificó el decreto que redujo un 20% las alícuotas de los derechos de exportación para la soja y sus derivados, el trigo, el maíz hasta el 30 de junio y la condición de que las liquidaciones se realicen 15 días después de la presentación de las declaraciones juradas.
“Reafirmaron lo que vienen sosteniendo en el sentido de que la baja viene de la mano de la recaudación fiscal y que tiene fecha hasta junio“, dijo Martins, tras la reunión. “Fue buena reunión, fue extraordinaria la decisión que tomaron, pero también le hicimos notar si es factible que se pueda rever el plazo de liquidación, dijeron que lo iban a analizar, aunque lo veían difícil”, señaló Cifarelli.
Si bien desde el Ministerio de Economía niegan que la medida haya sido negociada con el Fondo Monetario, la misma se adoptó en medio de la visita de una misión del organismo al país. Y, según pudo reconstruir Clarín, Pazo reconoció este martes que la temporalidad de la medida fue parte de la discusión con el organismo, del que Argentina busca obtener un “puente” financiero de hasta US$ 12.000 millones.
“El planteo del 30 de junio fue conversado y lograron llevarlo aún bajo la supervisión del Fondo, lo de los 15 días tiene que ver con que las empresas no registren embarques para el segundo semestre así que se va a mantener sin cambio. El Fondo les dijo que podían implementar la medida, pero que tenía que estar acotado en el tiempo y no tenía que haber sacrificio después del 30 de junio“, dijo una fuente que participó de la reunión.
El plazo de liquidación genera tensión con los exportadores. Desde el decreto, se redujo de 30 a 15 días para cereales y oleaginosas y de 180 a 15 días para los productos procesados. Los empresarios se quejaron de la dificultad de aquellos que tienen menos capacidad financiera, en medio de la convocatoria de acreedores de Los Grobo y Surcos. Pero el Gobierno necesita que el campo anticipe exportaciones para recomponer las reservas.
Pese a que los cambios todavía no se reflejaron en una mayor oferta de divisas, el equipo de Caputo apuesta a que la reducción del ritmo de devaluación al 1% y la reciente baja de tasas al 2,4% incentive a los productores a vender granos y a los exportadores a liquidar ventas externas para colocarse en inversiones en pesos. “Vamos a esperar, tienen que vender ahora, tendrían que hacer carry trade los productores“, les dijo Pazo a los empresarios.