Un policía blanco fue encontrado no culpable en Estados Unidos por la muerte de un joven negro desarmado, quien luego de ser estrangulado recibió una inyección de ketamina durante un arresto en 2019. Un jurado de Aurora, en Colorado, liberó a Nathan Woodyard, quien estaba acusado de homicidio involuntario y homicidio por negligencia criminal por la muerte de Elijah McClain, un caso que conmocionó al país hace cuatro años.

McClain, de 23 años, falleció en agosto de 2019 en Aurora, tres días después de haber sido estrangulado por la policía, sedado con ketamina y sufrir un paro cardíaco.

La policía lo había interceptado como respuesta a un llamado sobre una “persona sospechosa” que usaba máscara y caminaba “con actitud extraña”. Un oficial dijo que McClain, que estaba desarmado, intentó alcanzar la pistola de otro oficial, pero no hubo evidencia que respaldara la afirmación. La familia del joven afirmó que había salido a comprar té helado y que frecuentemente usaba la máscara para mantenerse abrigado porque sufría de anemia. 

Tres policías y dos paramédicos fueron llevados a la justicia por el caso. Hace tres semanas, un jurado absolvió a Jason Rosenblatt, en tanto que encontró culpable de homicidio por negligencia criminal al tercer oficial, Randy Roedema.

La muerte de McClain ocurrió meses antes del asesinato de George Floyd en Minneapolis, que desencadenó en mayo de 2020 una masiva reacción nacional con protestas contra la brutalidad policial en Estados Unidos contra las minorías, especialmente negros.

El juicio de los dos paramédicos, Peter Cichuniec y Jeremy Cooper, está previsto para este mes. 



Fuente-Página/12