El Gobierno restableció el Régimen de Incentivos al Abastecimiento Interno de Combustibles (Riaic), que alcanza a las compañías que deben importar parte del combustible que comercializan, en los casos donde la demanda interna supera a sus capacidades de refinación propia. La medida en cuestión tiene vigencia entre el 1° de agosto y el 31 de octubre, igual al plazo del congelamiento de los precios en las estaciones de servicio que negoció el ministro Sergio Massa.
El objetivo de fondo del Gobierno es prevenir faltantes de combustible para el público y a la vez aliviar la crisis del segmento de las estaciones de servicio. Para alcanzar esa meta, se restablecieron una serie de beneficios fiscales para las compras externas de combustibles efectuadas entre el 1° de agosto de 2023 y el 31 de octubre de 2023.
“Uno de los problemas que enfrenta la industria hidrocarburífera argentina es la insuficiencia estructural de la capacidad refinadora local para abastecer completamente una demanda creciente tanto industrial como del parque automotor”, indica el decreto.
Crédito fiscal
La medida abarca a las empresas refinadoras y las refinadoras integradas, que a partir de ahora podrán registrarse como crédito a favor un monto equivalente a la suma que deban pagar en concepto de Impuestos sobre los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, por las importaciones de gasoil y naftas. Las refinadoras integradas que operan en el país y se benefician de esta desgravación impositiva son YPF y Axion Energy, y las no integradas son Raízen (Shell) y Trafigura (Puma).
“El crédito a favor deberá utilizarse para pagar el mencionado impuesto por los hechos imponibles y las importaciones que se perfeccionen dentro de los 90 días de su acreditación, no pudiendo generar saldo a favor”, señala la publicación oficial. Cabe señalar que el beneficio fiscal alcanzará solo a las solicitudes que se efectúen dentro del plazo establecido por la Secretaría de Energía, aclara el Gobierno, con la posibilidad de que ese período pueda ser prorrogado por un mes más.
La medida entra dentro del paquete de compensación que el Gobierno negoció con las petroleras ante el congelamiento de precios que se aplicó en forma posterior a la devaluación del 14 de agosto. El Régimen de Incentivos se implementó por primera vez en junio de 2022 por 90 días y luego se restableció en enero de este año por 60 días, que se prorrogaron por otros 60 más.