La vida de una pareja no siempre es obvia, es más, sucede que pasamos por pasajes vacíos, especialmente en términos de deseo. Los hombres o las mujeres pueden notar y sentir una especie de “pereza” en torno a la sexualidad y todo lo que abarca. Una situación que puede ser preocupante para la persona que la vive, pero también para la pareja. ¿Cómo reaccionar ante esta caída en el deseo? ¿Es grave? Diane Deswarte, sexóloga y terapeuta, nos ilumina sobre el tema.
“Soy perezoso para hacer el amor”
Según la experta, esta es una de las frases que más escucha en consulta, como parte de una disminución del deseo o en terapia de pareja: “A menudo escucho la palabra pereza, la palabra tarea, casilla de verificación, obligación, etc.”dice Diane Deswarte. También confió en las razones de esta disminución del deseo: “La verdadera pereza le puede pasar a cualquiera, y a veces no hay una razón específica para eso. Tenemos derecho a ser perezosos para hacer el amor, seamos hombres o mujeres”.
El experto indica que en otros casos, la pereza puede establecerse por razones logísticas: “Para algunas personas, el sexo crea una carga mental (sábanas limpias, ducha para tomar después del sexo, etc.), pero tienes que deconstruir los códigos. También puede ser un poco “rápido”, por lo que una versión rápida del sexo, por diversión que no implica logística”.
Luego está la cuestión de los frenos al deseo sexual: “El estrés, el sentido de la obligación, la carga mental, la falta de higiene, el desinterés, el cansancio… Hay muchos frenos al deseo sexual. Es importante identificarlos para comprender mejor el por qué y mitigar esta disminución”.
Y añade: “También está el contexto que hay que tener en cuenta, como un posparto, un duelo, una caída de moral, una relación en conflicto, malestar con el cuerpo, etc.”. En estos casos, el término “pereza” se usa a menudo para “atajo”, porque es más directo y simple evocarlo en lugar de “Embarcarse en el trabajo sexológico, para entender las causas de esta desmotivación”dice Diane Deswarte.
¿Cómo podemos romper las creencias sobre la sexualidad y la frecuencia de las relaciones sexuales?
Para poner fin a estas creencias, es importante crear conciencia sobre el tema, hablar de él a su alrededor, sin filtro y sin tabúes, dejando de lado los mandatos del cumplimiento y el deber conyugal: “Todo tiene que ser repensado, pero antes de querer cambiar el mundo, es bueno empezar por cambiarte a ti mismo”dice el profesional.
Para concluir, es esencial comprender las diversas causas y razones de esta “pereza”. Es recomendable hablar de ello con tu pareja y hacer trabajo individual y/o de pareja para encontrar el equilibrio. También se recomienda ser ayudado por un terapeuta especializado en relaciones de pareja y sexualidad, que te acompañará en este viaje.
Diane Deswarte le asegura que la caída del deseo no significa (siempre) una falta de amor: “Esto no es lo que más sucede en la consulta, soy gente que está muy enamorada, que quiere querer y seguir adelante con su pareja y eso no significa que haya falta amor”.