El ministro de Obras Públicas de Santa Fe, Lisandro Enrico, confirmó este miércoles que las 289 obras públicas que se llevaban a cabo en la provincia con fondos nacionales “están todas paralizadas” y reclamó que la administración federal se haga cargo del mantenimiento de las rutas porque es “una obligación legal” y está “en juego la seguridad vial”.
El funcionario informó además de una reunión prevista para el 7 de marzo con el administrador de la Dirección Nacional de Vialidad, Raúl Bertola, a quien le solicitará “un plan de trabajo” para los 2.800 kilómetros de rutas nacionales que atraviesan la provincia.
En declaraciones a radio Aire de Santa Fe, Enrico dijo que concurrirá a la reunión con Bertola “para hablar de las obras viales de las rutas nacionales que pasan por la provincia, que son 19 en total y que implican 2.800 kilómetros de ruta”.
“Vamos a pedirle que se hagan cargo del mantenimiento de las rutas nacionales, lo más elemental. No estamos diciendo que vamos a pedir autopistas, (solo) lo más urgente, lo primero, es que el Gobierno nacional empiece a hacer las reparaciones elementales”, indicó el funcionario.
Enrico se refirió a “la tesitura de no querer hacer obras, que se entiende no hacer obras, no hacer autopistas, no hacer puentes, pero el mantenimiento de las rutas es una obligación legal que tiene el presidente de la Nación y sus funcionarios, porque está en juego la seguridad vial”.
“En estas rutas que tenemos, que algunas son de cuarta, se va a empezar a matar gente por esquivar pozos, entonces no es: hago o no hago obra pública, es una obligación legal el mantenimiento”, añadió.
Además, el ministro dijo que esa situación “está agravada por el hecho de que los impuestos en Santa Fe los seguimos pagando, las retenciones siguen”.
Enrico dijo que “viviendas, acueductos, plantas potabilizadoras, rutas, gasoductos, que son obras públicas que se hacen con fondos nacionales, esas obras públicas hoy están todas paralizadas, esa es la realidad”.
“Son 289 obras que había iniciadas en pequeños pueblos o grandes obras, como el acueducto San Javier-Tostado, pero están todas paralizadas”, puntualizó.
En ese sentido, añadió que “para dar una idea, hay 813 viviendas que están paralizadas del Programa Mi Casa, y otras 1.600 que se estaban por iniciar y obviamente no se van a iniciar”, al igual que “algunas del Programa Procrear.
El funcionario se quejó de que “hasta hoy es poco probable” dialogar con el Gobierno nacional: “No tenemos interlocutores, no sabemos con quién hablar y aparte es un Gobierno que no está organizado, no tiene una bajada de línea”.
“Las medidas que nos ofrecen son de personas que no están nombradas y tampoco tienen la bajada clara a nivel del Ministerio de Economía”, completó.