En San Luis está ocurriendo una historia que es símbolo de los tiempos que corren: en el edificio donde funcionó un set de cine, ubicado en la ciudad de La Punta, está por instalarse un cuartel de Gendarmería. Es cierto que hacía mucho tiempo que no operaba como tal, y que había tenido un uso mínimo para rodajes. Pero hace menos de dos años se proyectaba instalar allí la Cinemateca Nacional. La comunidad artística de San Luis -que batalla a su vez contra los postulados de la ley ómnibus- rechaza que donde hubo cultura ahora haya armas.
A tono con el Ejecutivo nacional, el provincial instala la idea de que la cultura no es prioritaria y que son otras las urgencias. “Quiero poner a Gendarmería porque el segundo problema más importante que tiene la provincia no es que no se hagan películas, es que nos roban o que está el narco“, dijo hace dos semanas Claudio Poggi, quien llegó nuevamente a la gobernación de la mano de una alianza ligada al macrismo. Así, confirmó una información que circulaba desde comienzos de año. Argumentó, en diálogo con la prensa, que hace 15 años que el set no se utiliza como tal: “Lo vamos a afectar entonces a un rol más necesario en este momento”. También dijo que los artistas serían escuchados y que se buscaría “un espacio para ellos”.
Medios locales habían informado el 6 de enero acerca del inicio de un estudio de factibilidad para el desembarco de Gendarmería en el edificio, que posee una superficie de 1800 metros cuadrados y un edificio anexo de 900. Integrantes del Comando Operativo de la fuerza y funcionarios de Seguridad recorrieron el inmueble, que a priori se usaría para hospedar efectivos. Esta historia se enmarca en otra más grande, que es el regreso de Gendarmería a la provincia, una de las primeras decisiones de Poggi en este mandato. Desde 2001, por decisión de Adolfo Rodríguez Saá, la fuerza no actuaba en territorio puntano.
La historia del set de cine
También en 2001, en octubre, San Luis sancionó su propia ley de cine (Nº VIII-0240-2004 (5675), con los objetivos de impulsar inversiones en la actividad, promover el desarrollo turístico, generar fuentes de trabajo y fortalecer el desarrollo cultural. La norma estipuló la creación de un fondo de fomento. Al cabo de unos años 62 películas se filmaron en la provincia, según cuenta a Página/12 el actor y director César Albarracín. Dentro de ese impulso se inscribe la inauguración, en 2005, del set, un proyecto trunco. Se decidió emplazarlo en La Punta, pero no en el centro de la ciudad. A la zona se le proyectaba desarrollo turístico. En aquel entonces no presentaba el crecimiento que muestra actualmente. Sólo había viviendas sociales, lo cual volvía difícil la producción.
El set estuvo inactivo hasta 2009, cuando se rodó Soledad y Larguirucho (dirigida por Manuel García Ferré, Néstor Montalbano y Carlos Pérez Agüero y estrenada en 2012). Un año más tarde se filmó allí, íntegra, Un amor de película (estrenada el mismo año, con dirección de Diego Musiak). En el caso de otros films se utilizó para escenas. También se hicieron videoclips y programas de TV. En concreto, hace 13 años que en el set no se realizan largometrajes y hace ocho que está en desuso en cuanto a filmación.
“En su momento fue demasiado avanzado para la producción que había. Además, Argentina no es un país de tanta película de set. Por otro lado, hoy en día la ciudad tiene cosas… se podría comprar allí comida, un foco. Se abrió el set en esa zona en un momento anticipado”, opina Albarracín. “Cuando empezó a funcionar se puso en la Universidad de La Punta (ULP) una carrera de cine. Pero después se cayó la ley, que está vigente, pero a nivel producción no hubo nada más. En 2011, último año de una de las gestiones de Alberto Rodríguez Saá, empezaron a darle más impulso al turismo de carnavales. Y el set terminó quedando como lugar turístico, en el que había cosas de las películas que se filmaron ahí, como vestuarios, archivos, latas de fílmico”, repasa el artista.
Históricamente -cuentan distintas fuentes- el espacio dependió del programa San Luis Cine, del Ministerio de Ciencia y Tecnología provincial. Alojaba las oficinas de este programa y era sede de acciones de la Secretaría de Cultura y la ULP. Iban, por ejemplo, estudiantes a hacer prácticas. “El año pasado trasladaron a una escuela secundaria”, añade Albarracín. La versión oficial lo señala como un lugar vacío y sin uso, en el que nunca se rodó una película ni se hacen actividades culturales.
El proyecto frustrado de Cinemateca
Hace dos años, en el último tramo de otra gestión de Alberto Rodríguez Saá, surgió la idea de trasladar la Cinemateca Nacional al set. Fue una propuesta del Ejecutivo puntano. El entonces ministro de Cultura de Nación, Tristán Bauer, viajó a la provincia, se reunió con funcionarios, recorrió el lugar. Se hizo un estudio de factibilidad; se firmó una carta de intención. La iniciativa no prosperó. “Era un sueño. Era la posibilidad de darle un uso interesante al set, y era hermosa para federalizar”, lamenta Albarracín, quien en ese momento era jefe de Estrategias de la Secretaría de Cultura.
Comunicado de los trabajadores del sector audiovisual
Los trabajadores del sector audiovisual de la provincia -nucleados en Unidxs por la Cultura y Cine Argentino Unido– expresaron su “descontento” por el destino del inmueble. En un comunicado reconocen que tenía “poco uso” para la actividad. “Pero (…) esperábamos dialogar con las autoridades provinciales para revertir esta situación que tiene más de diez años por la falta de aplicación de la ley de cine provincial, que fue ejemplo y modelo de las actuales leyes vigentes en varias provincias”, aclararon. Buscan armar “un plan en forma conjunta para aportar al PBI provincial, generar mano de obra y contenidos para el canal provincial y otras pantallas”, entre otras cosas. “Es muy triste que un espacio con potencial para generar cultura pueda ser usado para albergar una fuerza de seguridad pública“, remarcaron.
Este jueves, Albarracín y otros referentes del sector se reunieron con Ignacio Morris, director de Promoción Turística Cultural. “Se comenzó un diálogo. Nos atendieron bien, escucharon, preguntaron. Había mucho desconocimiento, y aunque no creo que se mantenga el set se vieron interesados. Nuestra pelea no es para mantenerlo como tal. No sé si sería operativo. Sí que se use para algo cultural. Dudo que al gobierno nacional le interese hacer el proyecto de la Cinemateca”, dice el cineasta. Aclara que el espacio depende, todavía, de Ciencia y Tecnología. En tanto, desde prensa del gobierno provincial aseguran que está bajo la órbita de Cultura y que la llegada de Gendarmería ya está en manos de Seguridad. El Ejecutivo provincial lo administra y puede aplicar una “sesión de uso”.
Marcelo di Gennaro, actor y director teatral, intuye que hay otra razón para el desembarco de la fuerza: “Vienen a reprimir protestas populares”, sugiere. “Hay otros lugares que demandan su presencia, como Rosario. En San Luis las cuestiones se podrían resolver con las policías provincial y federal. Meter fuerzas represoras en un espacio cultural es inaceptable. Hay otros disponibles a lo largo y a lo ancho de la provincia. ¿Cuál es el sentido de meterlos a 30 kilómetros de la ciudad capital, o a 130 de Villa Mercedes, donde puede haber focos para abordar?”, se pregunta.
Desde Buenos Aires Juan Palomino, Roly Serrano, Luciana Jury y Rep han condenado el plan, en testimonios recogidos por el diario La República. “Que los estudios de la ciudad de
La Punta no estaban funcionando
es verdad. Que la Ley de Cine se fue
degradando es verdad. Pero siempre hay que tener en cuenta que
cuando el Estado prioriza la cultura defiende la identidad. Este es un mensaje para el sector que obviamente está siendo amenazado“, dijo Palomino, quien vivió el “apogeo” de la ley de cine de San Luis. Potente fue la síntesis de Rep: “Digamos sí a las fábricas de arte; digamos no a los cuarteles”.