“Si veo a dos hombres besándose, me duele la barriga”, dijo el jefe del Consejo de Asesores Económicos de La Libertad Avanza, Carlos Rodríguez, en una entrevista televisiva en la que declaró abiertamente tener “un problema” con los gays, y justificó su discriminación a “un tema hormonal”. Los dichos del economista se suman a otras expresiones homoodiantes desde el sector político triunfante en el balotaje: referentes de la diversidad sexual expresaron su preocupación por la legitimación creciente de discursos discriminatorios y advirtieron sobre la necesidad de defender los avances logrados en el país.
En medio de la entrevista en LN+, el periodista Luis Novaresio le consultó por el posicionamiento que suelen expresar los referentes de LLA sobre los derechos humanos y la “empatía social”. El economista comenzó por explicar que él no es “una persona empática” y en ese sentido la conversación avanzó sobre los derechos de la comunidad LGBTIQ+. “A mí no me molesta un gay, yo no discrimino, pero no me vengan a joder con la marcha del orgullo con unos gordos semidesnudos usando corpiño”, expresó Rodríguez.
“Si queres que te explique mi problema con los gays, te digo: yo sé que vos (Novaresio) sos gay, y me siento perfectamente cómodo al 100 por ciento. Pero si yo veo a dos hombres besándose me duele la barriga”, fueron las declaraciones homoodiantes del asesor del presidente electo, Javier Milei.
“La próxima Marcha del Orgullo vení conmigo, yo te invito”, le dijo Novaresio, a lo que Rodríguez le respondió: “No, no, no me gusta. Es un tema de hormonas, yo creo que los gays no entienden”. Y volvió al periodista para decirle: “Hay un problema que ustedes tienen que entender, que es la testosterona, algo hormonal. Si yo veo a dos mujeres besándose me encanta pero si veo a dos hombres besándose me duele la barriga”. Ante lo que Novaresio le replicó: “Yo tengo tanta testosterona como vos. A mí me duele la barriga cuando a un pibe lo echan de su casa por ser gay o no le dan un trabajo por ser gay”.
No es la primera vez que se escuchan comentarios de este tipo en el partido de extrema derecha: integrantes de La Libertad Avanza se posicionaron en reiteradas oportunidades contra la diversidad sexual. Desde considerarla una patología, compararla con piojos o hasta recomendar la pornografía por sobre la Educación Sexual Integral (ESI).
“A los que nos duele la barriga es a quienes hemos sufrido la discriminación, la violencia, la exclusión por parte de estos sectores y hemos sido parte de un movimiento sumamente amplio que ha luchado fuerte para lograr que la sociedad nos mire amorosamente y no generarle un dolor de barriga a nadie. Y la verdad que ante esas declaraciones a nosotros, a nosotras y a nosotres se nos mueven las tripas”, dijo Estaban Paulón, diputado nacional electo por Santa Fe, político y activista por los derechos de las personas LGBTIQ+.
“Yo lo inscribo en un contexto en el cual estamos viendo la llegada al gobierno de una generación que fue protagonista de la política en los años 90 y que sigue pensando exactamente lo mismo que pensaba en ese entonces”, aseguró Paulon.
Carlos Rodríguez fue secretario de Política Económica de la Nación entre 1997 y 1998, durante el segundo gobierno de Carlos Saúl Menem, donde fue sucedido por el exministro del Interior de Mauricio Macri, Rogelio Frigerio. En este sentido, el diputado afirmó: “Fueron años muy complejos de un modelo de gobierno neoliberal que protagonizaron personajes como Rodríguez, en el cual no se avanzó de ninguna forma en cuestiones de derechos”.
“Lo que impacta –continuó Paulón– es que treinta años después pareciera que se puede volver a los años noventa en un minuto. Es la sensación de que a pesar de todo lo que hemos logrado, de todo lo que se ha construido, estamos a la vuelta de la esquina de volver 30 años en el tiempo”.
Por su parte, la titular del Instituto contra la Discriminación de la Defensoría del Pueblo de CABA y exlegisladora porteña, María Rachid, explicó que las declaraciones del asesor económico de Milei lo que expresan es “el sentimiento más visceralmente discriminatorio, prejuicioso y estigmatizante que hay en un sector muy minoritario de la sociedad y que este nuevo gobierno de LLA pretende legitimar”.
De esta manera se han expresado diversos miembros del partido en varias oportunidades. Milei en una entrevista reciente con el periodista Jaime Bayly, hizo una analogía entre las personas homosexuales y los elefantes para hablar del matrimonio igualitario: “Si querés estar con un elefante y tenes el consentimiento del elefante es problema tuyo y del elefante”. Asimismo, Victoria Villarruel fijó su postura sobre el matrimonio igualitario: “Llamarlo matrimonio, que es una institución que tiene que ver con lo religioso, no me parece”. Por su parte, la futura Canciller del gobierno, Diana Mondino, afirmó que, “como liberal”, estaba de acuerdo al proyecto de vida de cada uno, pero que es “mucho más amplio”, y para explicarse, aclaró: “Si vos preferís no bañarte y estar lleno de piojos y es tu elección, pero después no te quejes si hay alguien que no le gusta que tengas piojos”.
“Quizás esta vez fue más clara –dijo Rachid, en referencia a la entrevista de Rodríguez– pero en otras oportunidades que intentaron incluso ser respetuosos de la diversidad y expresar ideas de libertad, se les coló el conservadurismo, la discriminación y la violencia. Ya sea comparándonos con tener piojos, con tener sexo con elefantes o diciendo que el matrimonio igualitario es lo mismo que la unión civil”.
“Lo peor es que probablemente haya intenciones de que a esas declaraciones le sigan acciones concretas que intenten vulnerar los derechos conquistados estos años. Van midiendo para ver hasta dónde pueden avanzar”, expresó Paulón en referencia a las declaraciones de los libertarios y usó de ejemplo de las afirmaciones de “Bertie” Benegas Lynch, quien anunció que una de sus prioridades en el Congreso será derogar la ley del aborto legal, seguro y gratuito.
De todas maneras, tanto Paulón como Rachid acordaron en que los derechos adquiridos tienen “un correlato de mayoría social”, que más allá de haber votado a LLA, no está de acuerdo con esa perspectiva.
“Este sector de la política no representa en estas ideas a una mayoría de la sociedad argentina. Ha logrado representarla en otros aspectos y en otras sensaciones, pero aunque intente legitimar estas ideas yo no creo que pueda lograrlo”, aseguró la ex legisladora porteña. “La mayoría de la sociedad ha acompañado y celebrado que Argentina sea uno de los países más avanzados del mundo en materia de reconocimientos de derechos de la diversidad y eso no ha cambiado”, completó.
Por su parte, el diputado afirmó que “la gente que votó este proyecto no acompaña este tipo de declaraciones. Puede que los hayan votado por otros elementos, como la crisis, la falta de expectativa, la sensación de que ‘los mismos de siempre no van a poder resolver los problemas de siempre’. Pero no tienen una mirada antiderechos ni reaccionaria. Por eso es fundamental ponerlos en evidencia, hacer el trabajo político para empezar a desarmar la gran mentira que es La Libertad Avanza, no solamente en esto, sino en todo”.
“No podemos permitirles generar escenarios de batallas que la sociedad no está dando –afirmó Rachid–. Son sectores muy minoritarios los que se expresan de esta manera y no hay que darles una entidad mayor a la que tienen en términos de representación social. No hay que subestimarlos en términos políticos por su puesto, van a gobernar el país, pero creo que hay que ser prudente y tener en cuenta de que esta es una batalla ya ganada en Argentina y van a tener que hacer mucho y, en mi opinión, con poco éxito para cambiar eso”.
Informe: Lucía Bernstein Alfonsín.