Un hombre que fue condenado a 12 años de prisión por el crimen de Leandro Javier Costa Vidán, asesinado de dos puñaladas tras una discusión en un boliche del barrio porteño de Palermo en marzo de 2020, fue beneficiado con una reducción de la pena por la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional, informaron fuentes judiciales.
La resolución de la Sala I favoreció a Antonio Santiago Ramos Chávez (40) que le redujo a 10 años la condena por el delito de “homicidio simple” que en mayo de 2022 le dio el Tribunal Oral en lo Criminal 25 porteño.
Los jueces Gustavo Bruzzone, Mauro Divito y Jorge Luis Rimondi rechazaron los planteos de la defensa oficial respecto a que no había quedado probado “el dolo de homicidio” y que debía ser calificado como un “homicidio preterintencional”.
Además, la Cámara desestimó que el acusado “actuó en legítima defensa o, en su defecto, que excedió sus límites”, como propuso la defensora.
“La conducta de éste (Ramos Chávez) no sólo importó una respuesta absolutamente desproporcionada, sino que, además, había mediado una provocación de su parte”, sostuvo en su voto el juez Divito, al que adhirieron sus colegas.
No obstante, los magistrados convalidaron la crítica sobre “la mensuración de la pena impuesta” y llegaron a un acuerdo para que sea rebajada.
Es que el TOC 25, por la mayoría de los jueces Hugo Daniel Navarro y Ana Dieta de Herrero y con la disidencia de Gustavo Goerner respecto al monto de la pena, le aplicó 12 años de cárcel.
Respecto de la conducta posterior del procesado, pienso que su presentación ante las autoridades policiales una vez anoticiado del hecho, debió computarse como una pauta aminorante”, indicó Divito, quien valoró que no haya decidido eludir a la Justicia.
De acuerdo al fallo de la Sala I -al que Télam tuvo acceso- el Tribunal de primera instancia “enunció las circunstancias atenuantes y aportó las razones, vinculadas con las graves características del hecho atribuido, que tuvo en cuenta para arribar al cuestionado quantum (monto)”, aunque advirtió que “ciertos extremos no han sido adecuadamente ponderado”.
Tras la apelación, el fallo de la Casación entendió que “su revisión en esta instancia conduce a reducirlo y, de conformidad con la propuesta formulada por el juez que quedó en minoría”, ahora la pena quedó fijada en 10 años de prisión.
El homicidio
El hecho ocurrió el jueves 12 de marzo de 2020, alrededor de las 4 de la madrugada, en el cruce de las calles Fitz Roy y Cabrera.
Según la sentencia, “previo a esas circunstancias, Ramos Chávez había concurrido al local bailable ‘Makena’, ubicado en la calle Fitz Roy 1519, de esta ciudad, junto a su novia Paola Texeira, oportunidad en la que fue invitado a retirarse por personal de seguridad por haberle pegado una bofetada”.
“Una vez que el encartado egresó del boliche, detrás de él salió la víctima, Leandro Javier Costa Vidán, quien al observar que éste estaba insultando a los empleados de seguridad, le refirió ‘tomátela porque te cago a trompadas’, lo empujó y lo invitó a pelear“, estableció el TOC 25.
Tras ello, “y pese a que imputado le contestó ‘con vos ni me gasto’, ambos mantuvieron una discusión, inicialmente verbal, durante la cual este último extrajo del bolsillo de su saco un elemento filo cortante y lo sostuvo en sus manos”.
“Seguidamente, la víctima se alejó caminando en sentido a la calle Cabrera junto a su amigo Santiago Barbieri y Ramos Chávez se dirigió hacía la calle Gorriti. Sin embargo, detuvo sus pasos, se dio vuelta, y caminó en sentido hacia donde se encontraba la víctima”, indicó el Tribunal.
De esta manera, “ambos volvieron a cruzar sus caminos y se enfrentaron a los golpes, episodio que culminó con los apuñalamientos efectuados por el acusado en la zona del tórax y abdomen de Costa Vidán, mediante la utilización del mismo elemento filo cortante que, inicialmente, tenía en sus manos”.
Luego de la agresión, el imputado se retiró con su pareja y arrojó el elemento utilizado en la intersección de la calle Fitz Roy y la Avenida Niceto Vega.
La víctima, por su parte, intentó regresar a la puerta del boliche, pero luego de unos pasos, cayó desplomado a dos metros de la entrada, donde se constató, mediante la presencia de personal médico, su fallecimiento.
Al día siguiente, Ramos Chávez se presentó en la sede de la seccional 2da. de Florida, en Vicente López, confesó y fue detenido, tras lo cual quedó a disposición de la Comisaría Vecinal 14 B de la Policía de la Ciudad que investigaba el hecho.