El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, inicia este martes su ronda de consultas con autoridades israelíes en un intento de evitar una propagación regional de la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamas en Gaza, donde esta madrugada recrudecieron los ataques ordenados por el Estado hebreo.
Jan Yunis y Rafah, las mayores ciudades del sur del asediado territorio palestino, volvieron a ser blanco de intensos bombardeos en la madrugada, según un periodista de la agencia de noticias AFP.
Ambas localidades acogen a miles de desplazados internos desde que comenzó la guerra el 7 de octubre, luego de un ataque del grupo islamista en el sur del Estado hebreo, que dejó cerca de 1.2000 muertos, en su mayoría civiles, y 240 personas secuestradas -de las cuales 100 aun siguen retenidos en Gaza-, entre ellos una veintena de argentinos.
El Ejército israelí anunció que sus tropas mataron a 40 combatientes islamistas en las últimas 24 horas, en el marco de “operaciones terrestres ampliadas que incluyen ataques aéreos” en Jan Yunis, y que se incautaron todo tipo de armas.
Al mismo tiempo, confirmó este martes que otros nueve de sus militares murieron en combates registrados durante las últimas horas, lo que eleva a 185 el número de soldados israelíes caídos desde el inicio de la guerra, consignó la agencia de noticias Europa Press.
El conflicto comenzó luego de los ataques de Hamas del 7 de octubre, tras los que Israel prometió “aniquilar” al movimiento islamista palestino que gobierna Gaza desde 2007, y lanzó una ofensiva militar terrestre y aérea contra el territorio palestino.
El grupo islamista, catalogado de organización terrorista por Estados Unidos, Israel y la Unión Europea, afirma que al menos 23.210 personas murieron hasta ahora en los bombardeos israelíes, en su mayoría mujeres y menores de edad.
Desde Doha, el dirigente de Hamas Ismail Haniyeh hizo un llamado a los países musulmanes para que enviaran “armas” a Gaza como muestra de apoyo, al enfatizar que esta no es “sólo la batalla del pueblo palestino”.
Desde el comienzo de la guerra recrudecieron los temores a una propagación del conflicto, con ataques lanzados por otros enemigos de Israel en la región, reunidos en una alianza informal que incluye a grupos proiraníes de Siria, Irak, Líbano y Yemen.
El movimiento chiita libanés Hezbollah informó haber atacado un centro de mando militar en el norte de Israel, en respuesta a las muertes del numero dos de Hamas el 2 de enero y de un alto jefe de su formación ayer.
Blinken tiene previsto reunirse con el primer ministro Benjamin Netanyahu y con miembros del gabinete de guerra, incluido el líder opositor Benny Gantz, en la cuarta ocasión en que visita Medio Oriente desde que comenzó el conflicto.
Tras una cita con el presidente israelí, Isaac Herzog, el secretario de Estado resaltó “el momento difícil” que atraviesa Israel, pero afirmó que el país tiene “oportunidades reales” de integración con sus vecinos árabes.
“Creo que hay oportunidades reales, pero tenemos que superar este momento tan difícil”, aseguró tras un encuentro con el ministro israelí de Relaciones Exteriores, Israel Katz, en la última etapa de una gira que lo ha llevado a Turquía, Jordania, Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita.