El pacto de Acassuso, en el que Mauricio Macri le tendió una trampa política a Javier Milei como condición para darle su apoyo de cara al ballotage, sigue aumentando las tensiones entre ambos espacios. En aquella reunión en la casa del ex presidente, se le reclamó al libertario que bajara todas sus propuestas polémicas, pero el “León”, jaqueado por su socio forzado, resiste cada vez con menos potencia para no soltar su “Plan Motosierra”. “No se negocia ningún punto de mi política económica. No se negocian ni la dolarización ni el cierre del Banco Central”, expresó Milei ayer, mientras ingresaba al Congreso para ejercer en su banca de diputado nacional.
Asimismo, agregó que “con Macri tenemos diferencias, por eso hemos ido en estructuras distintas; ellos me brindaron apoyo incondicional, pero obviamente no estamos del todo de acuerdo, como en la eliminación del Banco Central”.
Del otro lado de la cuerda, fuentes del PRO aseguraron a Página I12 que o Milei “hace lo que pedimos o no hay acuerdo”. No es que Macri sea un fanático de políticas que protegen a los ciudadanos del ajuste, pero observa que los extremos a los que lleva Milei el debate lo ponen en serio riesgo de perder votos propios de cara al ballotage. Además, por estas horas en el PRO despliegan un nivel de comunicación agresivo que intenta mostrar el dominio del macrismo por sobre la voluntad de un Milei golpeado por el resultado de la primera vuelta electoral.
En la otra esquina, en La Libertad Avanza (LLA) entienden lo contrario, que es necesario seguir despegados discursivamente del macrismo. Que es precisamente esa oposición no sólo anti casta y ante peronista, sino anti Macri, lo que los llevó a ser elegidos como la mejor opción opositora.
Así, el acuerdo con Macri es la prenda de cambio que generó un colapso interna en los equipos de Milei. Hoy, tal como adelantó este diario, el mapa del poder libertario tiene a Milei bancando el pacto y casi sumiso a lo que dice Macri; y a su hermana Karina y el “Chino” Carlos Kikuchi, su armador político, tratando de contener la esencia. El temor allí es que de cara a la segunda vuelta, se pierdan votos del 30 por ciento que obtuvo el candidato en la primera vuelta. “Hay gente muy caliente”, admiten cerca de Milei. Esa gente es la que aún no se ha expresado en disidencia respecto al acuerdo con el PRO, como sí lo han hecho otros dirigentes del interior por medio de un comunicado dado a conocer en las últimas horas.
La plataforma y el X de Benegas Lynch
“No hubo condicionamientos a la plataforma electoral”, dijeron en el cuartel central de Milei a este diario. Confirmaron, además, que el documento de reformas titulado “Plan de Gobierno”, que incluye el cierre del BCRA, el recorte de subsidios y la dolarización, entre los puntos económicos, sigue sin cambios. Cuentan que Milei trabaja a diario puliendo esas ideas económicas en su nuevo búnker: alquiló una habitación en el Hotel Sheraton Libertador, situado sobre la avenida Córdoba, en la que duerme algunos días de la semana. Luego, utilizan salones de reuniones y hasta el lobby para hacer las reuniones con los equipos técnicos.
En una de esas noches de hotel, Milei recibió la famosa llamada de Macri en la que el líder del PRO le manifestó su malestar por lo que entiende es un desequilibrio emocional demasiado marcado. Los dirigentes del PRO que conocieron detalles de la llamada, la describen como “salvaje”. Desde ese momento, Milei se vio forzado a girar en su carácter, algo que derivo en el extremadamente extraño video donde lee un documento con críticas a Sergio Massa casi de manera robótica.
De este modo, la pregunta que se hacen los gestores iniciales de LLA es por qué si la dolarización y el cierre del BCRA se sostienen, no dejan hablar en los medios a los economistas que la defienden. El cerrojo comunicacional centró toda la campaña en Milei desde que Macri le cerró el pacto de apoyo en su casa. Quedaron vedados para salir en medios el banquero Juan Nápoli; el clausurador del BCRA Emilio Ocampo y hasta Darío Epstein, uno de los defensores de la dolarización. También el ex candidato a intendente porteño, Ramiro Marra.
La única arena disponible para rebeliones libertarias contra el pacto Milei Macri parecen ser las redes sociales. En las últimas horas, Alberto Benegas Lynch hijo, al que Milei considera como una especie de patriarca de los libertarios, se jugó una ficha fuerte y casi que terminó describiendo a la perfección el malestar de muchos por el avance del macrismo sobre LLA. “No estoy diciendo que suceda, solo advierto que no se tenga la absurda pretensión por parte de los de siempre de “domarlo” a Javier Milei para que retroceda en sus extraordinarias propuestas que precisamente son las que lo catapultaron y las que pondrán a nuestro país de pie”, dijo el dirigente que saltó a la fama por haber sugerido, en el acto de cierre de campaña de Milei, cortar relaciones con el Vaticano mientras Francisco siga siendo el Papa.