Por tercera vez y luego del apriete de Mercado Pago, el directorio del Banco Central pospuso el reemplazo del fondeo de las cuentas de las billeteras virtuales a través del Débito Inmediato (Debin) por el mecanismo de Transferencias Inmediatas Pull. La medida, que iba a comenzar a regir el primero de diciembre, se aplicará a partir del primero de marzo a menos que el nuevo directorio del Banco Central decida volver a posponerla (o suspenderla). Desde la entidad monetaria justifican la medida para dar seguridad a los usuarios, pero las Fintech desmienten este argumento y alegan que el sistema bancario tradicional pone trabas para evitar perder los depósitos bancarios.
El miércoles de esta semana, los más de 4 millones de usuarios que utilizan Mercado Pago en Argentina recibieron un mensaje con el asunto “Tu banco dejará de estar vinculado a Mercado Pago”. En el cuerpo del mail, con letras grandes la empresa continúa la explicación: “Por una norma del Banco Central, desde el 1 de diciembre ya no tendrás vinculada tu cuenta bancaria a Mercado Pago. Más abajo, sin color y con letras más chicas, tranquiliza: “Recordá que vas a poder seguir ingresando dinero en tu cuenta mediante transferencia bancaria, que es gratuita y se acredita al instante”.
El mensaje que la empresa del magnate Marcos Galperín envió a los usuarios de Mercado Pago a modo de alerta culminaba con una advertencia: “Estamos esperando una respuesta de las autoridades del Banco Central para evitar que esto suceda”. Con este correo, la billetera virtual más importante del país estaba presionando (una vez más) al directorio del Banco Central, que este jueves tenía reunión de directorio, para seguir posponiendo la aplicaciónde esta normativa.
Y lo logró. Tras el encuentro, el BCRA publicó un comunicado avisando que los usuarios podrán seguir utilizando el debin recurrente para fondear cuentas propias de proveedores de servicios de pago hasta el primero de marzo. Los nuevos usuarios, sin embargo, sí deberán vincular las cuentas a través de transferencia inmediata pull.
El conflicto comenzó en septiembre de este año, cuando las entidades bancarias impulsaron a través de la Comisión Interbancaria de Medios de Pago de la República Argentina (Cimpra) –un foro del que participan todos los actores del sistema de liquidación de pagos y valores en el Banco Central– que se reemplacen las transferencias Debin por las TIP. El Banco Central accedió al pedido y, tras idas y vueltas con Mercado Pago que paradojicamente forma parte del Cimpra a través de su representado que es la Cámara Argentina de Fintech, pospuso su aplicación para el 1 de diciembre (la original era el 1 de septiembre).
Un tema personal
La normativa original del BCRA dispone que los usuarios que quieran ingresar dinero de una cuenta bancaria a una billetera digital deberán realizar, por única vez, una autorización para enrolar la cuenta. El mecanismo para hacerlo cambia banco a banco pero implicará ingresar los datos de la cuenta y un token de seguridad. “Algún banco puede llegar a pedirte que vayas al cajero a hacer la autorización, pero en la mayoría es completamente digitales”, aseguró a PáginaI12 una fuente del sector bancario. Una vez realizada esa autorización por única vez, el usuario podrá ingresar el dinero normalmente a la cuenta tal como venía haciéndolo hasta ahora. Si en 90 días no se viera actividad en la cuenta, los datos pueden pedirse de nuevo (y por única vez). También tendrá la posibilidad de traer dinero de la billetera digital directo desde su cuenta bancaria.
El Central justificó que la normativa se realiza “con el fin de prevenir casos de fraude que afectan a las personas usuarias”. Es que la modalidad Debin funciona como un “pedido de pago”, es decir que una persona solicita un pago u orden de débito, la otra acepta y se debita inmediatamente el dinero (es muy común para el pago de facturas, por ejemplo, a través del escáner de QR que funcionarían como el pedido de dinero).
Como la modalidad es tan simple, las operaciones son más factibles de estafas. Normalmente, los estafadores engañan a los usuarios diciendo que “enviaron una transferencia y necesitan que el usuario la acepte”, cuando en realidad están aceptando que se debite el dinero de su cuenta. Son engaños que se originan mayormente en compras por internet que a través de las billeteras virtuales, pero la existencia de esta modalidad lo hace posible.
“El Debin recurrente fue creado con el fin de que una persona jurídica pueda cobrarle a una persona humana un servicio que le brinda en forma habitual, no para que se fondearan cuentas propias, y se diseñó para mejorar la experiencia de cobro en lo que se conoce como débito automático”, explicó el Central.
Con las transferencias pull, se enrolan dos cuentas en particular (la de una billetera virtual y la del banco tradicional, por ejemplo) con el objetivo de habilitarlas para hacer transacciones en ambos sentidos. La novedad para los usuarios a partir de que se autorice la disposición, es que podrán ingresar dinero de Mercado Pago a la cuenta del banco desde la plataforma de Home Banking. Una de las principales ventajas de este sistema, que en el Central aseguran que es más seguro, es que el usuario tiene la posibilidad de desvincular la cuenta desde el Home Banking en el caso de que sufra un robo o hackeo de su celular. “Al retener la potestad de anular la vinculación, brinda mayor seguridad sobre su cuenta”, continuó el BCRA.
La verdadera disputa
El conflicto detrás de normativas, mails y tuis es por la captación de los depósitos de los usuarios, fuente de financiamiento de bancos y billeteras virtuales. Según el último informe de inclusión financiera del BCRA del segundo trimestre del 2023, el uso de las billeteras virtuales crece a un mayor ritmo que el de las tradicionales.
El diferencial de las billeteras virtuales es que ofrecen, además de disponibilidad inmediata, remuneraciones diarias a sus clientes solo por tener el dinero en ellas. En un contexto de alta inflación, tener estacionada la plata en un lugar que no rinde es perder dinero día a día. Con esta normativa, los bancos pueden facilitar el ingreso de dinero desde las billeteras virtuales. “Las fintech no nos oponemos a las Transferencias Pull, pero si a apagar el Debin, que es un sistema que funciona y lo hace muy bien”, aseguraron a PáginaI12 desde el sector.
Además, hay un interés económico. Es que en 2021 el Central dispuso que “para las operaciones que involucren DEBINes recurrentes, las entidades financieras receptoras
podrán cobrar a las entidades financieras originantes una tasa de intercambio de hasta el 0,3 por ciento por operación, con un tope de 4,50 pesos (que luego se actualizó). De acuerdo a fuentes de Mercado Pago, esa comisión nunca se cobró, pero el banco sí cuenta con un costo transaccional.