Más de un millar de ciudades y localidades ucranianas se quedaron sin electricidad a medida ante el debilitado sistema energético con el que cuenta el país tras los ataques de las fuerzas rusas en el marco del conflicto bélico, que comenzó hace casi dos años, informó este martes la compañía estatal de electricidad Ukrenergo en un comunicado.
Entre las regiones más afectadas del país se encuentran Dnipro, Mikolaiv y Odesa, principalmente, así como otras seis, que sufrieron apagones en menor medida. Así, las autoridades alertaron de que el consumo de electricidad se encuentra en uno de sus picos más altos ante el duro invierno y que las temperaturas llegan a los 15ºC bajo cero en algunas partes del país, según recogió la agencia ucraniana de noticias UNIAN. “Este nivel de consumo sigue aumentando debido a la caída considerable de la temperatura en toda Ucrania”, precisó Ukrenergo en un mensaje difundido a través de su cuenta de la red social X.
Ucrania se vio obligada a importar electricidad de Rumania y Eslovaquia para satisfacer la demanda de energía de su población. La empresa energética instó a los ciudadanos a ahorrar la mayor cantidad de electricidad posible, al tiempo que señaló que las plantas térmicas del país todavía están recuperándose de los ataques perpetrados el invierno pasado por las tropas rusas contra la infraestructura energética ucraniana. Además, advirtió que las centrales aún no lograron operar a su máxima capacidad.
En paralelo, al menos cuatro personas murieron y decenas fueron heridas en un nuevo despliegue de bombardeos rusos en Ucrania. “El enemigo lanzó decenas de misiles contra ciudades y localidades pacíficas de Ucrania”, dijo Oleksii Kuleba, subjefe de la oficina de la presidencia, que informó además de 33 heridos. La fuerza aérea ucraniana reportó que derribó 18 misiles de un total de 51 proyectiles lanzados por Rusia contra importantes infraestructuras en varias regiones del país.
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, hizo un llamado a sus socios de Occidente. “Se necesitan nuevas medidas globales contra quienes continúan ayudando a Rusia, puesto que la plena efectividad de esas sanciones pasa por atajar cualquier alternativa que Rusia pueda plantear para eludirlas”, indicó el mandatario en un mensaje que recogen las agencias de noticias ucranianas. En ese sentido, reclamó medidas más contundentes contra aquellos que ayudaron a Rusia a sortear las sanciones.
La situación en Belgorod
Sin embargo, la guerra se profundiza también en territorio ruso, como en la ciudad fronteriza de Belgorod, que recibió en los últimos días incesantes bombardeos de parte de las fuerzas de Kiev, la mayoría de los cuales pudieron ser interceptados por las defensas antiaéreas.
El Kremlin prometió este martes que hará todo para frenar los ataques ucranianos en la castigada ciudad. “Nuestro ejército continuará haciendo todo lo que está en su poder para minimizar el peligro en un primer momento y después eliminarlo completamente”, prometió el portavoz del presidente Vladimir Putin, Dmitri Peskov, reportó la agencia de noticias AFP. También acusó a Kiev de atacar deliberadamente a civiles en suelo ruso con ayuda de equipamiento militar suministrado por sus aliados occidentales.
Después de la reanudación de los bombardeos masivos rusos contra su territorio, Ucrania multiplicó en los últimos días sus ataques contra esta ciudad de 335.000 habitantes a 40 kilómetros de la frontera. Por esta razón, las autoridades locales ordenaron el lunes la evacuación de cientos de habitantes. “Unos 300 residentes de Belgorod, que decidieron ser evacuados temporalmente, están siendo alojados en centros de acogida temporal en Stari Oskol, Gubkin y el distrito de Korochanski, más alejados de la frontera”, indicó el gobernador de la región de Belgorod, Viacheslav Gladkov, en Telegram.
La evacuación de Belgorod es una medida sin precedentes desde que Moscú inició su ofensiva en Ucrania en febrero de 2022. Además, constituye un golpe para los esfuerzos del Kremlin de mantener una apariencia de normalidad y defender que el conflicto no afecta directamente la vida cotidiana y la seguridad de los rusos.
Las pérdidas ucranianas
Rusia afirma tener la iniciativa en el frente y está tratando de minar la moral ucraniana mediante bombardeos diarios contra la infraestructura civil y militar del país que, en muchas de sus regiones, carece de las defensas antiaéreas necesarias para protegerse de la constante lluvia de misiles. “Mantenemos la iniciativa a lo largo de toda la línea del frente”, afirmó el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, en una reunión con los altos mandos de las Fuerzas Armadas de Rusia al referirse a la situación de los campos de batalla.
Shoigú subrayó que el Ejército ucraniano perdió en 2023 más de 215.000 hombres y 28.000 piezas de armamento, aunque no ofreció datos de bajas propias, algo que no hace desde septiembre de 2022, cuando cifró en 5.937 los soldados rusos muertos en la guerra. También acusó al Gobierno ucraniano de que, “a instancias de sus patrocinadores occidentales, lleva a sus soldados al matadero” y que busca cualquier posibilidad de completar las filas del Ejército ucraniano. Según él, nada de ello cambiará la situación en el frente y solo alargará el conflicto bélico. Además culpó a Estados Unidos de intentar satisfacer sus ambiciones de liderazgo mundial a costa de las vidas de los ucranianos.