Empleados del Banco Nación se movilizaron desde la casa central de la entidad, frente a Plaza de Mayo, en rechazo a las modificaciones que introduce el decreto de necesidad y urgencia (DNU) publicado en el Boletín Oficial, que abren la posibilidad de la privatización de la entidad. Es la primera manifestación masiva de trabajadores que sale a la calle en respuesta al avance privatizador del Poder Ejecutivo. El Banco Nación, junto a Aerolíneas Argentinas, fueron las únicas dos empresas estatales mencionadas por el presidente de la Nación y en el texto del DNU en los capítulos referidos a privatizaciones. 

En el caso de la aerolínea de bandera, tal como explicó este diario en su edición de ayer, el propósito explicitado del gobierno es cederle la empresa a sus trabajadores, previa apertura del mercado al sector privado a través del regreso a la política de cielos abiertos ya implementado por Mauricio Macri en su gestión. 

Al grito de “No se vende”, los empleados del Banco Nación se manifestaron en rechazo de la derogación impulsada por el Gobierno sobre el artículo de la ley que impedía la venta de la principal entidad financiera del país a privados.

Este decreto deroga un artículo crucial que desde 1999 impedía la privatización de la entidad bancaria. Las protestas se intensifican ante la preocupación por la posible desregulación total y la vulnerabilidad laboral que esto podría implicar.

El banco, considerado el más grande del país con presencia en casi todas las ciudades argentinas, se ve afectado no solo por la eliminación de esta restricción, sino también por la pérdida de ciertas atribuciones financieras, como la gestión de multas y depósitos judiciales.

La eliminación de esta prohibición ha desatado preocupaciones sobre el futuro de la institución y su papel en la economía nacional. Además, se suscitan debates sobre la supuesta desatención a problemáticas laborales y económicas más apremiantes, como el poder adquisitivo de los trabajadores y la inflación galopante que azota al país.

Esta situación, que ha causado movilizaciones y cuestionamientos, pone de manifiesto la incertidumbre y el malestar ante posibles cambios radicales en las reglas de juego económicas y laborales en Argentina.

El gremio del sector, la Asociación Bancaria, acompañó la manifestación con su secretario general, Sergio Palazzo a la cabeza. A través de un comunicado, La Bancaria expresó su “rechazo y repudio enérgico al decreto de necesidad y urgencia del presidente de la Nación, Javier Milei (…). Consideramos que no hay necesidad ni urgencia para esta batería de medidas, que van claramente en perjuicio y detrimento del pueblo argentino y sus trabajadores/as y nadie más. Todavía nos seguimos preguntando en qué momento pasamos a ser casta y la casta real pasó a ser un mero espectador de este siniestro espectáculo”.

“Representa un retroceso en la historia argentina, décadas que creíamos olvidadas, se avasalla y golpea a la democracia, a las instituciones, solo genera dolor y sufrimiento en el pueblo e incluso en la gente que esperanzada votó por este espacio”.

Como bancarios/as tampoco vamos a permitir que el Banco Nación y los bancos públicos en general, sean convertidos en una Sociedad Anónima para su posterior venta o liquidación, como si se tratara de un negocio más. Hay una función social que nunca debe resignarse y es la razón de ser de este tipo de instituciones”.

“Nos declaramos en estado de alerta y movilización, en defensa de las y los trabajadores y el pueblo en su conjunto. Nos veremos en las calles, no estamos dispuesto a aceptar este brutal y salvaje ajuste, ni tampoco a resignar ningún derecho”.

Previamente, una declaración de la Comisión Gremial Interna del banco expresaba: “El decreto de Milei condena al país, a sus trabajadores y al pueblo en general a vivir una realidad de miseria, desprotección y un salto al vacío. En relación al Banco Nación, plantea el cambio en su configuración: de ser un ente autárquico a Sociedad Anónima para su posterior venta”. 

“Como siempre lo dijimos el Nación no se toca. Vamos a defender el BNA como siempre lo hicimos: defendiendo su carácter de banco de fomento y desarrollo nacional. No vamos a dejar que lo desfinancien, que lo achiquen o lo vendan”, agregó.



Fuente-Página/12