La comercialización de granos va en aumento de la mano de la brusca devaluación del 118 por ciento y con la modificación del “dólar exportador”, que permitió a las empresas liquidar el 80 por ciento de las divisas a la cotización oficial y el restante 20 por ciento al tipo de cambio Contado con Liquidación desde el lunes 11 de diciembre. Se llevan declaradas exportaciones por casi 2,4 millones de toneladas de maíz, soja y trigo, según la información de la plataforma oficial SIO-Granos. Las empresas no tardaron en reaccionar ante un esquema de precios más favorable, pero especialistas advierten que algunas retienen parte de la cosecha como resguardo de valor.
Tras la devaluación, la cotización de los granos en pesos rebotó. El precio de la soja escaló hasta los 260.000 pesos la tonelada al cierre del último viernes, lo cual supuso un aumento del 13 por ciento respecto al lunes 11 de diciembre, cuando asumió el presidente Milei y se puso en marcha el nuevo “dólar exportador”. Mientras tanto, el maíz llegó a los 150.000 pesos la tonelada el viernes 22 de diciembre, aumentando 32,7 por ciento con respecto al primer lunes del nuevo gobierno y el trigo cotizó en 185.000 la tonelada al cierre de la última semana, lo cual marcó una suba de 33,9 por ciento en los últimos días, según datos de la plataforma oficial SIO-Granos.
Consultada por Télam, Mariela Brandolin, de la agencia FyO, consideró que más allá del aumento en la comercialización, “estamos lejos de un boom de ventas como el que les tocó a los primeros programas (exportadores) y esto tiene sentido ya que, si bien los precios aumentaron producto de la devaluación y la brecha se achicó enormemente, hay muchos que prefieren quedarse con los granos como resguardo de valor”. Además, señaló que “la cantidad de toneladas se fue moviendo casi al compás del precio”. Cabe notar que se refiere a mayores declaraciones de exportaciones, lo cual no necesariamente indica un incremento en la cosecha de granos.
En la misma línea, el responsable del Área de Análisis de Mercados de la corredora de granos Grassi, Ariel Tejera, sostuvo que “si bien en materia de negocios tuvo lugar una ligera reactivación, aún coexisten algunos factores que limitan el dinamismo comercial”. “Hay que destacar que estamos en un contexto donde se espera un importante avance en la inflación y tasas reales de colocación en pesos negativas. O sea, las alternativas para colocar pesos continúan siendo limitada en cierto sentido”, consideró. Es un capítulo que está por verse cómo será la relación de las cerealeras con el nuevo gobierno, que parece querer contentar casi exclusivamente al empresariado privado.
Por su parte, el analista de la consultora AZ-Group Javier Roca indicó a Telam que “el nuevo dólar oficial para exportar y las necesidades de venta generaron mayor movimiento en la comercialización de los granos que estaban en manos de los productores”, ya que en esta época del año se deben cancelar vencimientos de cuotas de alquileres y de tarjetas, como así también hay que pagar las labores de implantación de los cultivos de verano y la cosecha de los de invierno.
Por último, el director de la consultora RIA, Javier Preciado Patiño, remarcó que “hasta ahora, el principal éxito del Gobierno en lo que respecta a la cadena granaria es haber cerrado sustancialmente la brecha entre el dólar exportador y el dólar libre, que está en el orden del 12 por ciento, ya que contra un CCL en 945 pesos, el dólar exportador con esta fórmula ronda los 850 pesos”. “Esta disminución de la brecha era una de las acciones más esperadas por el productor agrícola”, agregó.
En tanto, reconoció que “hay una fuerte actividad de las cerealeras para registrar exportaciones: ya se anotaron 14,7 millones de toneladas de maíz de la nueva campaña (que se empieza a cosechar en marzo) y no hay síntomas de que la registración se vaya a desacelerar en los próximos días”.
Además, el especialista señaló que “si bien la exportación se anticipa a una posible suba de retenciones (del 12 por ciento actual al 15 por ciento), el Gobierno tendrá una muy buena recaudación fiscal en concepto de derechos de exportación en el mes de abril, y presumiblemente también mejore la liquidación de dólares, en tanto las compañías traen divisas para comprar los granos”.