Se estima que alrededor de 50000 hectreas agrcolas sufrieron daos significativos Foto Luis Cetraro
Se estima que alrededor de 50.000 hectáreas agrícolas sufrieron “daños significativos”. Foto: Luis Cetraro.

Las tormentas que tuvieron lugar a principios de esta semana en la región núcleo provocaron “severas consecuencias” sobre 50.000 hectáreas agrícolas que quedaron “muy afectadas”, según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

“Alrededor de 50.000 hectáreas agrícolas se vieron muy afectadas por granizo y excesos de lluvia, de las cuales se estima que se perderá la mitad de la producción”, indicó la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la entidad rosarina.

Además, reportó “graves daños en el centro este de Buenos Aires y estragos en el noroeste argentino (NOA)”.

De acuerdo con el documento, la denominada “tormenta de Navidad afirmó el carácter violento e impredecible que está teniendo el tiempo en el país”.

Entre las localidades de la región núcleo más afectadas se encuentran Cañada Rosquín, Carlos Pellegrini, El Trébol, Irigoyen, Clason y Montes de Oca.

Las lluvias que se esperan hasta fin de año muestran que la región núcleo tendría una pequeña tregua, auguró la entidad rosarina

Se estima que alrededor de 50.000 hectáreas agrícolas en esta área sufrieron “daños significativos” debido a inundaciones, exceso de humedad y granizo, y se perderá la mitad de la producción, proyectó la entidad.

“Los ingenieros agrónomos señalaron que la recuperación en algunos de estos campos será difícil, ya que muchos lotes de soja ya estaban en etapa de floración”, sumó.

En tanto, en el sur de la región pampeana, distritos como Saladillo, Adolfo Alsina, Lobería y Balcarce también experimentaron “fuertes daños” debido a las tormentas.

“A pesar de que las cosechas de trigo y cebada estaban teniendo buenos rendimientos, las tormentas recientes han ocasionado daños importantes en algunos casos”, indicó la GEA.

Incluso el NOA, que había estado sufriendo por la falta de lluvias, “fue golpeado por lluvias intensas que causaron estragos en provincias como Tucumán y Catamarca”, dijo.

La BCR además contempló que “a pesar de la reciente recuperación hídrica, las tormentas no se comportaron como se esperaba, desviándose de los modelos predictivos incluso horas antes de su formación”, tras lo cual advirtió que “lo más preocupante es la violencia con la que estas tormentas golpearon, causando inundaciones y graves daños en su paso”.

“Nunca antes habían visto mangas de granizo tan amplias y con una cobertura de daño tan extensa como en esta ocasión”

Asimismo, subrayó que “el granizo ha sido uno de los principales problemas en esta tormenta” y los daños que este fenómeno causa “afirman que nunca antes habían visto mangas de granizo tan amplias y con una cobertura de daño tan extensa como en esta ocasión”.

“La preocupación se centra en la intensidad de las tormentas porque, según los expertos, la violencia de las mismas no se debe únicamente a ‘El Niño’, sino a otras variables que afectan el comportamiento atmosférico, como las corrientes de aire frío y húmedo desde el sur y suroeste, así como la interacción con frentes fríos intensos”, se explayó la GEA en el informe.

Las lluvias que se esperan hasta fin de año muestran que la región núcleo tendría una pequeña tregua, auguró la entidad rosarina.

“En esta oportunidad la acumulación de humedad atmosférica en la zona núcleo no va a ser tan significativa como en las últimas semanas. La presencia de lluvias generalizadas y de generoso volumen estaría limitada al extremo norte de Santa Fe, NOA y noreste argentino”, dijo el consultor de la BCR Alfredo Elorriaga.

En este sentido, agregó que “aun así, el pasaje del sistema frontal por la franja central puede dejar algunas lluvias en el sur de Córdoba, La Pampa y el sudoeste bonaerense, sectores que necesitan agua”.





Fuente Telam