Las fuerzas armadas israelíes mataron este domingo a dos palestinos durante un ataque a un campo de refugiados en el norte de Cisjordania, informó el Ministerio de Salud de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
El Ejército israelí confirmó en un comunicado la muerte de un hombre sospechoso de haber participado en ataques contra sus soldados.
El inicio de las hostilidades entre Israel y el movimiento islamista Hamas en la Franja de Gaza el 7 de octubre avivó la violencia en Cisjordania, un territorio ocupado por Israel desde 1967 que Palestina reclama para formar su Estado.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, aseguró que las tensiones en Cisjordania, donde se multiplican los ataques de colonos israelíes contra palestinos, eran “el verdadero obstáculo para la solución de dos Estados”.
“Cisjordania está en ebullición (…) podríamos estar en vísperas de una explosión mayor”, añadió, informó la agencia de noticias AFP.
El Ministerio de Salud palestino informó que dos hombres de 19 y 36 años fueron abatidos durante una incursión israelí en el campo de Tulkarem, donde viven más de 27.000 refugiados palestinos.
Al menos otras cinco personas resultaron heridas en la operación, añadió la Media Luna Roja Palestina.
El Ejército israelí indicó que sus fuerzas buscaban detener a un hombre sospechoso de haber “participado en ataques contra las fuerzas israelíes y asesinatos de personas sospechosas de colaborar con ellas en Tulkarem”.
“Terroristas abrieron fuego y arrojaron explosivos contra las fuerzas israelíes, que respondieron” matando al sospechoso que iba “armado”, añadió el cuerpo armado.
Un policía israelí resultó “gravemente herido y fue hospitalizado”, añadió.
El balance del conflicto
Al menos 398 palestinos murieron en Cisjordania a manos de las tropas israelíes o de colonos desde el 7 de octubre, según el Ministerio de Salud de la ANP.
El Ejército israelí indicó la semana pasada que había detenido a 3.100 palestinos, incluidos 1.350 miembros de Hamas, en Cisjordania desde el 7 de octubre.
Ese día, milicianos de Hamas ingresaron al sur de Israel y mataron a 1.200 personas y secuestraron a 420, entre ellas, una veintena de argentinos.
Como respuesta, Israel prometió aniquilar a Hamas, que gobierna el enclave desde 2007, y desató una campaña de bombardeos y ataques terrestres que mataron a casi 29.000 palestinos, la mayoría mujeres y menores, y dejaron a la Franja de Gaza reducida a ruinas.
Además, de los 2.3 millones de gazatíes que habitaban la Franja, el 85% tuvo que huir de sus hogares por los ataques israelíes.