Nacida como una práctica en el mundo de la belleza asiática, la piel de cristal representa un fenómeno que ha trascendido las fronteras de género, involucrando ahora también a todos aquellos hombres interesados en el cuidado del rostro que aspiran a tener una piel del rostro impecable y luminosa, como el cristal. Y la razón es fácil de decir.
Pero ¿qué es la piel de cristal?
El término piel de cristal se refiere a una rutina cutánea particular que hace que la piel impecable y brillante, tanto que casi parece traslúcido. Es una tendencia que está cambiando la forma en que las personas abordan el cuidado de la piel, fomentando la adopción de rutinas de cuidado de la piel integrales y específicas para lograr una piel que brille con salud y belleza. Desde hace algún tiempo, los contenidos sobre el cuidado masculino crecen continuamente en TikTok y el hashtag #glassskin tiene, sólo en Italia, más de 1 millón de visitas por semana, para un total de más de 3 mil millones hasta la fecha. Entre estos vídeos muchos son de hombres que muestran cómo llevan a cabo su rutina piel de cristal. ¿Así que lo que? ¿Cómo puedes replicarlo también en casa? Veamos juntos los secretos detrás de esta piel de cristal.
Doble limpieza con detergentes, base de la piel de cristal
La limpieza es la base de toda rutina cutánea, limpiar el rostro dos veces al día, por la mañana y por la noche, siempre es fundamental. Lo que se requiere para conseguir una piel de cristal es un paso más: se recomienda por la noche. lávate la cara dos veces. Se llama doble limpieza, el primer paso se debe realizar con un limpiador oleoso para eliminar las impurezas o cualquier rastro de maquillaje del rostro. Tras el aclarado, se realiza el segundo paso con un detergente espumoso, que además de garantizar una limpieza aún más profunda, también garantizará que se eliminen los restos del primer detergente.
La exfoliación, un paso fundamental
La exfoliación es quizás uno de los pasos más delicados de toda rutina cutánea, la atención y conocimiento de tu piel es fundamental. La primera regla a la hora de hablar de exfoliación es no exagerar con el exfoliante: máximo una o dos veces por semana. Teniendo en cuenta estas sencillas reglas, solo queda elegir cómo queremos exfoliar nuestra piel: mediante un peeling que contenga ingredientes ligeramente abrasivos o mediante una exfoliación con enzimas químicas.
Hidratación profunda
La hidratación es fundamental para obtener una piel cristalina. Utilice una loción o crema hidratante rica en ingredientes como el ácido hialurónico para mantener su piel bien hidratada y radiante. La hidratación es fundamental para conseguir el aspecto de piel de cristal. También se recomienda utilizar mascarillas faciales hidratantes y nutritivas con regularidad para mantener la piel hidratada y luminosa. Las mascarillas elaboradas con ingredientes como el té verde y el ácido hialurónico son especialmente eficaces.
Sueros iluminadores
Para combatir la piel apagada y apagada, el producto de cuidado que puede ayudarte es sin duda el sérum iluminador, que unifica el tono de la piel y le aporta luminosidad. Es muy importante aplicarlo entre los últimos pasos de la rutina de la piel, después de haber aplicado ya productos para hidratar la piel: se puede aplicar en todo el rostro o en zonas específicas para crear mechas, como la punta de la nariz, pómulos o arco de las cejas. . Los sueros iluminadores son ricos en vitamina C, a menudo a base de ácido hialurónico.
proteccion solar
Un factor fundamental para una piel perfecta, sin defectos, es sin duda la prevención: nunca es tarde para empezar a incluir una crema SPF en tu día a día para protegerte de los rayos solares. Actualmente se ha demostrado que para combatir el envejecimiento de la piel, pero no sólo, es necesario aplicar protección solar todos los días, incluso en los días nublados y durante el invierno.
Bebe mucha agua
Otro hábito muy importante para mantener tu piel hidratada y luminosa es beber mucho. Es un consejo que no se limita sólo al bienestar de la piel, de hecho se recomienda para llevar un estilo de vida saludable no beber menos de dos litros y medio al día.