La organización de derechos humanos sudafricana Foundation for Human Rights recibió este lunes en el Palacio San Martín el Premio Internacional de Derechos Humanos Emilio Mignone por “abordar el legado histórico del apartheid y promover la transformación y el respeto por el Estado de derecho”. El galardón entregado por la Cancillería argentina junto a la Secretaría de Derechos Humanos, la familia Mignone y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) fue recibido por el director ejecutivo de la fundación, Zaid Kimmie, quien puso de relieve la tarea constante de familiares y militantes para juzgar a los genocidas y sus cómplices, tanto en Sudáfrica como en Argentina.
“Amor y solidaridad contra el autoritarismo”
En esta ocasión el premio revistió un significado particular al cumplirse los 40 años de democracia ininterrumpida en Argentina. El canciller Santiago Cafiero presentó el premio enviándole un mensaje al presidente electo: “Hoy el país está atravesando un momento de mucha convulsión y lo voy a decir con total honestidad y libertad: son 30 mil Javier Milei, son 30 mil. Isabel Mignone, hija de Emilio, uno de los principales defensores de derechos humanos del país, expresó: “La Argentina nunca exigió la pena de muerte para los militares genocidas. La idea era que en nuestro país todo debía ser dentro de la ley y nunca fuera de ella. Esperemos que esto siga rigiéndonos en el futuro”.
Por su parte la directora ejecutiva del CELS, Paula Litvachky, subrayó que “en contextos adversos las organizaciones de derechos humanos ponemos nuestra fuerza, amor y solidaridad para pelear contra el autoritarismo, la violencia, la discriminación, para construir una sociedad con más derechos. Este premio es un reconocimiento a esa dedicación”. Zaid Kimmie, director ejecutivo de la Foundation for Human Rights, dijo al recibir el premio que “hace falta un trabajo continuo por parte de los familiares, compañeros y amigos para asegurarse de que se haga justicia: siempre es un esfuerzo colectivo”.
Paralelos entre Argentina y Sudáfrica
En diálogo con Página/12 luego de la ceremonia, Kimmie dio sus primeras impresiones del premio recibido: “Por supuesto conocemos las muchas otras organizaciones que han ganado este galardón y el increíble trabajo que han realizado. Nos sentimos muy honrados por el premio y por lo que representa”. Doctor en Filosofía por la Universidad de Ciudad del Cabo, Kimmie recordó que Argentina está entrando en su 40º año de democracia, mientras que el próximo año se cumplirán 30 años de los primeros comicios celebrados en Sudáfrica aplicando el derecho al sufragio universal.
“Foundation for Human Rights fue reconocida este lunes por ocuparse de los crímenes y las graves violaciones de derechos humanos que se produjeron durante el apartheid. Y creo que en muchos sentidos son similares a las violaciones de derechos humanos que ocurrieron bajo la dictadura militar argentina. Por eso hay muchos paralelismos entre las experiencias de los dos países. Y Argentina ha sido un gran defensor de nuestro trabajo posdemocracia, particularmente en lo que respecta a tratar con desaparecidos y realizar pruebas genéticas para identificar a las personas que fueron enterradas en fosas comunes”, remarcó Kimmie.
Entre 1996 (año en que fue creada la fundación sudafricana) y la actualidad se vieron, “como en todas las cosas, períodos de progreso y luego períodos de dificultad” en materia de derechos humanos a nivel mundial. “Creo que la lucha por los derechos humanos ha sido en general positiva. Creo que hay más personas que viven bajo instituciones democráticas. Y así, incluso en esas circunstancias, cuando las cosas van mal, cuando se retrocede, siguen ocurriendo dentro de un marco democrático. Todavía hay grandes zonas del mundo que se enfrentan a dificultades extremas, pero en general ha habido un progreso positivo”, planteó Kimmie.
Frente al avance de las expresiones autoritarias en distintas partes del mundo, Kimmie señaló que en Sudáfrica le preocupa una variante de la extrema derecha vinculada al populismo. “Eso tiene que ver con la identificación de los grupos vulnerables como los responsables de las dificultades económicas que atraviesa el país. Y sí, eso nos preocupa mucho. Estamos entrando en una nueva serie de elecciones el próximo año y existe la posibilidad de que algunos de estos partidos populistas puedan incursionar en la política“, alertó a este diario el director de Foundation for Human Rights.
Un premio de prestigio mundial
A través del Premio Internacional Emilio Mignone, Argentina reconoce a instituciones y/o personas extranjeras residentes en el exterior que se destacan en la promoción y protección de los derechos humanos en sus países, tanto en temas de lucha contra la impunidad por violaciones masivas y sistemáticas de derechos humanos, así como en la lucha contra todo tipo de discriminación y el fomento de la diversidad, o la defensa de los derechos civiles y políticos, de los derechos económicos, sociales y culturales, entre otros. Para este año se presentaron 51 candidaturas de organizaciones y/o personas de países de América, África, Asia y Europa.
Durante la ceremonia de este lunes estuvieron presentes el vicecanciller, Pablo Tettamanti; la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Cecilia Todesca, el subsecretario de Asuntos para América latina, Gabriel Fuks; el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel; Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y representantes del cuerpo diplomático acreditado en nuestro país. En su edición 2022 el premio fue entregado al Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Honduras (COFADEH).