Según el relevamiento que realiza la Secretaría de Política Económica, la inflación semanal fue del 2,2 por ciento, lo cual indica una suba del 8 por ciento mensual entre la segunda semana de septiembre y misma de octubre, producto de las variaciones en el mercado de cambios.
“La suba semanal ha sido más alta de lo que esperábamos una semana atrás y entendemos ha estado influenciada por la fuerte suba reciente de los dólares financieros, del orden del 20 por ciento en muy pocos días”, explicó Gabriel Rubinstein, titular de esa área del Ministerio de Economía.
Los datos recogidos por la secretarían indicaron que hubo subas mayores al promedio de 2,2, particularmente en frutas (9,4) y verduras (7,3). En cambio, los alimentos y bebidas de almacén subieron igual al promedio, mientras que indumentaria subió 1,9 y en carnes 2,1 por ciento, es decir a la baja.
“Luego de los picos de agosto del orden del 15 por ciento, nuevamente en el acumulado de cuatro semanas, en las últimas semanas las subas han alcanzado valores cercanos al 8 por ciento”, concluyó el informe.
El reporte explicó, además, que “cuando los dólares financieros registran subas abruptas, muchos comerciantes y productores aumentan sus precios preventivamente, y muchos consumidores convalidan tales aumentos, por temor a que las subas se aceleren más aún”.
En este sentido ponderó “la importancia de que
la Argentina cuente con reservas suficientes para invertir en los mercados de
divisas en momentos de significativa incertidumbre, conteniendo la propagación
de conductas disruptivas”.