¿Y si el secreto de la felicidad estuviera en el simple acto de ser generoso? Ésta es la observación de varios investigadores sobre la felicidad. Hacer algo por alguien que está en dificultades, hacer un favor a un amigo o incluso hacer una donación a una asociación… todas estas acciones podrían hacerte especialmente feliz.

¿Ser generoso es la clave de la felicidad?

Varios estudios sugieren que efectivamente existe un vínculo significativo entre generosidad y felicidad. Una investigación realizada por Dunn, Aknin y Norton en 2008 demostró que gastar tiempo, energía y dinero en los demás puede generar más felicidad que gastarlo todo en uno mismo. De manera similar, una investigación de 2005 encontró que realizar actos de bondad hacia los demás (sin esperar algo a cambio), incluso los más pequeños, puede generar un impacto significativo en el nivel de felicidad experimentado. Esta investigación sugiere que la generosidad, ya sea financiera o en forma de acciones, puede desempeñar un papel crucial en la configuración de nuestra felicidad personal y la construcción de relaciones sociales cada vez más ricas.

¿Cuáles son los pequeños gestos cotidianos para ser más feliz?

Cada día puedes implementar varias acciones que te permitan cultivar tu felicidad. Tómate un tiempo todos los días para agradecer lo que te hace feliz o las cosas por las que estás agradecido. Además, dedicar tiempo a actividades agradables como leer, meditar o dar un paseo al aire libre promueve la relajación y la satisfacción personal. Además, centrarse incluso en pequeños actos de bondad hacia los demás, como una cálida sonrisa o un gesto pensativo, no sólo puede alegrar el día de alguien, como el de un compañero de trabajo, sino también alimentar nuestro propio sentido de felicidad.



Fuente Traducida desde grazia.fr