Israel lanzó este martes cientos de bombardeos en la Franja de Gaza, a cuatro días del sorpresivo ataque por tierra, mar y aire de Hamas en su territorio, y expandió una movilización sin precedentes de reservistas en posible preparación de una ofensiva terrestre en el enclave palestino. La situación humanitaria en Gaza se deteriora rápidamente, en una escalada de violencia que ya deja más de 1.900 muertos. Los medios y las redes se inundaron de imágenes de los últimos kibutz y comunidades recuperadas por el Ejército israelí, exhibiendo cadáveres dispersos, cuerpos mutilados y quemados.

Rumbo a una “ofensiva total”

“Estamos ya en medio de la campaña pero esto sólo es el principio, ganaremos con la fuerza, con mucha fuerza“, advirtió el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. En una entrevista telefónica con el presidente estadounidense, Joe Biden, dijo más tarde que el ataque de Hamas contra Israel es de “un salvajismo nunca visto desde el Holocausto”.

Israel impuso el lunes un “asedio total” de la Franja de Gaza para que no llegue “ni electricidad, ni comida, ni agua, ni gas”, en palabras de su ministro de Defensa Yoav Gallant. Israel ordenó además a sus ciudadanos evacuar todas las localidades en torno a Gaza, haciendo temer una inminente ofensiva terrestre contra ese exiguo territorio de 360 kilómetros en el que sobreviven 2,3 millones de palestinos, bajo bloqueo israelí desde hace 16 años. En un indicio de un posible agravamiento del conflicto Israel expandió su convocatoria de reservistas a 360 mil.

“He levantado todas las restricciones. Hemos recuperado el control de la frontera y estamos pasando a una ofensiva total”, afirmó Gallant este martes al reunirse con militares israelíes y combatientes de élite cerca de la frontera de Gaza. Las tropas israelíes liberaron el kibutz de Kfar Aza, una de las comunidades más próximas a Gaza, de tan solo 800 habitantes, y habrían encontrado cuerpos desmembrados y decapitados, incluidos niños y bebés

El Ejército no ofreció detalles sobre esos episodios pero señaló que “lo que pasó en el kibutz Kfar Aza es una masacre en la que mujeres, niños, bebés y ancianos fueron brutalmente masacrados a la manera del Estado Islámico. Hasta el momento medios como Haaretz y Times of Israel no confirman que se hayan encontrado bebés decapitados en el lugar, una información que solo proviene de una periodista que cita una fuente militar anónima.

Como parte de sus ataques el Ejército israelí bombardeó el puesto fronterizo de Rafah, que comunica la Franja de Gaza con Egipto, tres veces en 24 horas. Este punto de paso es la única salida del enclave palestino que no está controlada por Israel. Tel Aviv fue blanco por otra parte de disparos de cohetes desde el sur de Líbano, por tercer día consecutivo, y replicó bombardeando esa región. Estos últimos ataques fueron reivindicados por las Brigadas Al Qasam, brazo armado de Hamas.

Durante la madrugada del miércoles Israel realizó casi un centenar de ataque aéreos contra objetivos de Hamas en el centro de Gaza. Así lo informaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), que precisaron que los ataques se centraron en el área de Daraj Tufah, que según explicaron es uno de los principales puntos desde el que los militantes de Hamas lanzan sus ataques. Las FDI también atacaron un edificio supuestamente utilizado por la Yihad Islámica y anunciaron que mataron a varios militantes de Hamas en el cruce de Erez, principal paso fronterizo entre Gaza e Israel.

Hamas amenaza con los rehenes

Por su parte Hamas amenaza con ejecutar a los cerca de 150 rehenes que secuestró durante su incursión en Israel, entre quienes hay mujeres, niños y ancianos así como jóvenes capturados durante un festival de música. “Cada ataque contra nuestro pueblo sin previo aviso será respondido con la ejecución de uno de los rehenes civiles”, afirmó el brazo armado de la organización islamista. 

El martes la organización terrorista indicó que dos de sus jefes murieron en los ataques israelíes. Se trata de Zakaria Muammar, a cargo de asuntos económicos de Gaza, y de Jawad Abu Shamala, que coordinaba los contratos con otros grupos palestinos desde su cargo de jefe de relaciones nacionales de Hamas.

El grupo islamista palestino acusó al presidente estadounidense Joe Biden de “tratar de encubrir los crímenes de Israel” con sus “encendidos” comentarios sobre el ataque sin precedentes en territorio israelí”. El primer avión cargado con munición avanzada procedente de Estados Unidos aterrizó durante las últimas horas en la base aérea de Nevatim, en el sur de Israel, según el vocero de las FDI, general Daniel Hagari.

Muertes en aumento y crisis humanitaria

Más de mil personas, incluyendo a varios extranjeros, fueron asesinadas y unas 2.800 resultaron heridas desde el sábado en territorio israelí. El Ejército indicó además que había hallado los cuerpos de 1.500 combatientes de Hamas, pero no queda claro si las cifras se superponen con las muertes previamente reportadas por autoridades palestinas, que reportan 900 fallecidos y unos 4.000 heridos por los bombardeos israelíes de Gaza.

El ministerio de Salud palestino pidió la apertura de un pasillo humanitario para recibir material médico y evacuar a los heridos graves. “Por cuarto día consecutivo la brutal agresión a Gaza continúa con la máxima ferocidad, cometiendo crímenes contra la humanidad. Toma como objetivo barrios residenciales y destruye hogares con los habitantes adentro. Esto refleja su intención de llevar a cabo un acto genocida”, alerta el comunicado.

Desde la Franja las imágenes de bombardeos indiscriminados sobre la infraestructura civil son desoladoras: unos 170 edificios residenciales y 1.000 casas fueron destruidas. Los bombardeos aniquilaron por completo a 22 familias, con un total de 150 individuos, y obligaron a 140 mil ciudadanos a huir de sus casas y alojarse en refugios hacinados o en patios de hospitales, indicó el ministerio de Sanidad de la Franja. 

La ONU dijo este martes que el asedio israelí a la región viola la ley internacional. El organismo de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos (UNRWA) está albergando a más de 137 mil personas en escuelas en todo el territorio y familias acogen a unas 41 mil personas más, de acuerdo la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).

La Organización Mundial de la Salud dijo que los insumos médicos que tenían distribuidos en siete hospitales de Gaza se agotaron tras los ataques israelíes y llamó a abrir un corredor humanitario. “La imposición de asedios que ponen en peligro la vida de civiles al privarlos de bienes esenciales para su supervivencia está prohibida por el derecho internacional humanitario”, declaró el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk.

Nuevos frentes en el conflicto

Al mismo tiempo que la guerra entre Israel y las milicias palestinas entra en su cuarto día sin señales de llegar a un fin, aumenta la tensión en la frontera norte, donde ya se evacuaron algunas comunidades israelíes ante el temor de que el conflicto abra ahí un nuevo frente. Varios cohetes se lanzaron el martes desde el sur del Líbano hacia Israel y el Ejército israelí respondió atacando dos puestos de observación pertenecientes al grupo chiita libanés Hezbollah.

Poco después el mismo grupo anunció que había destruido un tanque israelí mediante dos misiles teledirigidos, ataque que también fue seguido de un bombardeo israelí sobre otro puesto de observación de la formación. Además el Ejército israelí respondió con artillería y morteros al lanzamiento de “una serie de disparos” de proyectiles desde Siria, en el primer ataque desde ese país hacia el Estado judío desde el comienzo el sábado de la guerra entre Israel y las milicias de Gaza.





Fuente-Página/12