Un hombre reveló de manera pública un reciente inconveniente de salud personal, relacionado con su rostro, y terminó cautivando a millones de personas con su anécdota.
El protagonista de esta historia se llama Nathan y es un joven de 27 años que vive en Reino Unido, según una entrevista publicada por el portal de noticias de la revista estadounidense Newsweek.
En mayo, este ciudadano británico acudió a su cuenta de TikTok (@nfisher08) y contó que había sufrido un problema médico. Un día, a comienzos de ese mes, Nathan estaba conduciendo su auto en dirección a la casa de su novia cuando notó que “algo no andaba bien” con su cara.
“No podía sonreír con normalidad y mi boca se sentía extraña“, recordó el joven a través de un posteo escrito en la red social. En aquel momento, él creyó en un principio que “tal vez” había tenido un ACV.
“Inmediatamente temí estar padeciendo un ACV, pero luego no manifesté los demás síntomas propios de la enfermedad”, dijo al respecto mediante la publicación de TikTok.
Nathan hacía referencia a que no tenía dolor de cabeza, alteraciones en su equilibrio, pérdida de fuerza o movilidad en sus extremidades, problemas de visión repentinos y tampoco dificultades para hablar.
Después de haber analizado la situación, Nathan optó por no ir a un hospital y llegó a la conclusión de que su incomodidad en la cara se debía ‘simplemente’ al cansancio acumulado.
Entonces, el joven siguió adelante con los planes que había imaginado para el resto del día. Y a la noche se fue a dormir sin pensar en el tema de su rostro.
Qué pasó al día siguiente: la mitad de su cara paralizada
Al cabo de unas horas de sueño, el ciudadano británico se despertó con una desagradable sorpresa: el lado izquierdo de su cara estaba paralizado. Él no podía cerrar su ojo y tampoco sonreír de forma natural. “Mi situación empeoró“, explicó en TikTok.
Ante este contexto, pidió un turno urgente con un médico clínico. Enseguida, este profesional de la salud lo derivó a un hospital para que allí lo sometieran a varios estudios, como por ejemplo una tomografía computarizada y una resonancia magnética.

Al principio, los médicos no descartaron que el paciente en cuestión haya sufrido un ataque isquémico transitorio (AIT), también conocido de manera informal como “pequeño ACV” o “mini-ACV“. Por lo tanto, los especialistas del hospital tomaron los recaudos necesarios para la ocasión.
Cuál fue el diagnóstico que recibió el joven
Días más tarde, Nathan se hizo nuevos estudios clínicos y recibió una noticia sobre su cuadro: “Me diagnosticaron parálisis de Bell, (NdR: Bell’s palsy en inglés)”, aclaró el joven en TikTok.
La parálisis de Bell es una afección que causa debilidad repentina en los músculos de un lado de la cara, de acuerdo con información del centro médico-académico estadounidense Mayo Clinic (Clínica Mayo). “En general, la debilidad es a corto plazo y mejora en algunas semanas. La debilidad hace que la mitad de la cara se vea caída. La sonrisa se ve de un solo lado y resulta difícil cerrar el ojo del lado afectado“, aseveró la institución.

Por otra parte, Mayo Clinic indicó que se desconoce la causa exacta de esta afección y que puede aparecer a cualquier edad. “Los expertos creen que está causada por la hinchazón e irritación del nervio que controla los músculos de un lado de la cara. La parálisis de Bell puede deberse a una reacción que tiene lugar luego de una infección viral“, comunicó el centro médico-académico en su página web.
“Por lo general, los síntomas comienzan a mejorar en el plazo de algunas semanas y se alcanza la recuperación completa en unos seis meses. Existe una pequeña cantidad de personas que continúan teniendo los síntomas de la parálisis de Bell de por vida. Rara vez, la parálisis de Bell se produce más de una vez”, anunció la entidad.
El duro proceso de recuperación: “Llanto, frustración y confusión”
Afortunadamente, en el caso de Nathan, su cuadro mejoró con el paso del tiempo. Sin embargo, el proceso de recuperación no fue fácil para él.
Por su parte, el joven se vio en la necesidad de cumplir un estricto tratamiento durante varias semanas. En ese período, sufrió muchos altibajos emocionales.

“Hubo llanto, frustración y confusión. Me resultó difícil dormir, socializar, comer y beber“, expresó mediante su posteo. A su vez, el ciudadano británico aseguró que tuvo que aprender de nuevo a mover los músculos de su cara.
“Me sentí inseguro. Me afectó mentalmente, porque lo que más me gusta de mí es mi sonrisa y de repente desapareció por un tiempo. Por suerte, fue temporal, pero me afectó porque me sentía muy incómodo en entornos sociales. No podía comer ni beber bien, se me caía la baba y me costaba comer. El ojo me lagrimeaba y no pude cerrarlo durante dos semanas, así que dormir era un suplicio“, declaró Nathan a Newsweek.

En la actualidad, su rostro se encuentra recuperado, aunque aún conserva una ligera debilidad muscular. Él espera que este inconveniente desaparezca por completo.
En las redes, su historia llegó a más de ocho millones de usuarios. Compartí lo que me sucedió para concientizar. Además, lo hice para conectar con aquellas personas que tengan lo mismo que yo”, reflexionó Nathan en TikTok.