“Al fin al cabo, Bretón era un hombre corriente. Hannah Arendt habla de esta banalidad del mal, que surge en la insignificancia y la simpleza de un sujeto anodino y frío como él. Es evidente que no se pueden explicar las transgresiones que se suceden hasta derivar en un parricidio pero hay un momento en el que las leyes morales del mundo desaparecen: ése es el intersticio que Luisgé Martín persigue para poner un poco de luz sobre algo que no se puede llegar a comprender jamás”, se lee en la contratapa de El odio, el último libro del escritor madrileño Luisgé Martín, que tenía previsto desembarcar en las librerías españolas el miércoles 26 de marzo pero un recurso judicial acaba de frenar.

El odio, publicado por Anagrama, es una novela de no ficción en la que Martín se propuso bucear en la monstruosidad de José Bretón, un exmilitar y excamionero andaluz que en 2011 intoxicó con fármacos recetados por un psiquiatra a Ruth y a José, sus hijos de seis y dos años, y los incineró en un campo familiar de Córdoba.

“Si yo no puedo tenerlos, ella tampoco los tendrá”, habría dicho Bretón antes de llevar a cabo el asesinato de sus propios hijos para causarle el más insoportable de los dolores -motivación de la violencia vicaria– a Ruth Ortiz, su exmujer y mamá de los nenes, que quería divorciarse de él.

En julio de 2021, Luisgé Martín contactó por carta a Bretón, quien en 2013 fue condenado a 40 años de prisión aunque podría quedar en libertad en 2036.

Desde entonces, intercambiaron más de medio centenar de epístolas, hablaron por teléfono y el escritor lo visitó en el Centro Penitenciario Herrera de la Mancha, en Ciudad Real, a más de 200 kilómetros de donde asesinó a sus nenes.

“El hombre que mató a Ruth y José quiere pedir perdón por el daño que hizo”, le llegó a decir Bretón al escritor, según confesó Luisgé Martín en estos días a la prensa española. Esa declaración de José Bretón sería su primera confesión pública del crimen que cometió hace 14 años.

José Bretón, condenado a 40 años de cárcel por el asesinato de sus hijos Ruth y José, entra en la Audiencia Provincial de Huelva.EFE / Julián Pérez José Bretón, condenado a 40 años de cárcel por el asesinato de sus hijos Ruth y José, entra en la Audiencia Provincial de Huelva.EFE / Julián Pérez

“No podemos dar voz a los asesinos”

Enterada de la inminente publicación de El odio, Ruth Ortiz, la exesposa de Bretón, pidió a la Justicia que paralice la salida del libro.

“Está asistiendo horrorizada a cómo la vida y asesinato de sus dos hijos pequeños está expuesta públicamente en todos los medios de comunicación con detalles, comentarios y expresiones que ni siquiera aparecen en la sentencia, plagado de afirmaciones terribles”, señala en el escrito que su abogada presentó ante la Audiencia Provincial y la Fiscalía de Córdoba.

La fiscalía andaluza trasladó el reclamo a la de Barcelona, sede de Anagrama, la editorial que publica El odio. Solicitan paralizar la distribución del libro por intromisión ilegítima del derecho a la intimidad y la propia imagen de los nenes asesinados.

“No podemos, de ninguna manera ni forma, dar voz a los asesinos para que puedan faltar al honor, a la intimidad y a la imagen de las víctimas, ni para que puedan revictimizarlas. Si no está bien regulado, tendrá que regularse correctamente, y si está regulado y no se cumple, se tiene que cumplir y hacer cumplir”, agregó Ruth Ortiz en una carta que envió a los medios españoles que promocionaban la novela de no ficción de Luisgé Martín.

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, utilizó las mismas palabras de Ortiz para condenar la publicación del libro: “No se puede dar, en ningún caso, voz a los asesinos, voz a los violentos, voz a quien ha asesinado a sus propios hijos para hacer el mayor daño posible a la madre, a la mujer”, dijo Redondo.

La ministra agregó: “Creo que también somos responsables, tenemos que ser conscientes de que no se puede revictimizar todavía más a esa mujer, a esa víctima”.

El escritor reconoció que nunca tuvo en mente contactar a la exmujer de Breton. “Creo que es una persona a la que no hay que meter en esto”, dijo Martín a la prensa española mientras promocionaba su libro.

“Vi una serie de hace dos años en la que ella participaba con su voz -Bretón, la mirada del diablo- y me pareció, ya me lo pareció en el momento del crimen, una persona de una entereza y de una dignidad moral acojonantes. No me habría atrevido a irrumpir en su vida para plantearle esto”, agregó el autor de El odio.

En 2023, Canal Sur, la televisión andaluza, emitió Bretón, la mirada del diablo, una miniserie documental de tres capítulos que repasa minuciosamente el crimen de los hermanitos Bretón Ortiz y que comienza con la leyenda: “Esta historia está construida con el testimonio directo de los que la vivieron, la estudiaron o la sufrieron. En este relato sólo hay un culpable posible”.

La palabra del autor

Ni el escritor o ni la editorial conceden entrevistas por estos días. Ambos han emitido comunicados en los que dejan en claro su postura: que El odio llegue a los lectores tal como estaba previsto.

“Empecé a escribir El odio porque era incapaz de entender que alguien pudiera matar a sus propios hijos”, dice Luisgé Martín en su comunicado.

El autor madrileño justifica su obra, inspirada en el género true crime (crimen verdadero) en referentes como Truman Capote en A sangre fría o Emmanuel Carrère con El adversario.

“No me comparo literariamente con esos autores -ojalá pudiera hacerlo-, pero sí comparo mi propósito con los suyos: indagar sobre el odio, sobre la brutalidad de la naturaleza humana, sobre la crueldad, sobre las estructuras sociales que sostienen esa violencia inacabable”, dice Martín.

Fotografía de archivo (08/01/2012) de Ruth Ortiz, junto a un cartel con unas fotos de sus hijos, Ruth y José Bretón. EFE/Rafa AlcaideFotografía de archivo (08/01/2012) de Ruth Ortiz, junto a un cartel con unas fotos de sus hijos, Ruth y José Bretón. EFE/Rafa Alcaide

Anagrama se defiende

La Constitución reconoce el derecho fundamental a la creación literaria. Por ello, Anagrama considera que tanto el autor como la editorial están en su derecho de publicar esta obra, pero esperaremos a lo que las resoluciones judiciales indiquen”, subraya el comunicado de la editorial.

“El tratamiento literario de El odio se aleja y rechaza cualquier intención que no sea la de presentar al lector la maldad del asesino sin justificar ni exculpar el crimen sino al contrario, mostrando su horror”, agregan.

“Desde Anagrama somos plenamente conscientes de la monstruosidad de los crímenes cometidos por José Bretón y comprendemos la sensibilidad que puede suscitar la exploración de la condición del asesino que aborda el escritor Luisgé Martín en El odio”, admiten.

Mientras tanto, la página web en la que la editorial presentaba el libro como “una perturbadora y excelente exploración de la mente de un asesino y de los motivos que lo llevaron a cometer un crimen tan real como atroz” hoy pide disculpas “porque no puede ser hallada”.





Fuente Clarin.com

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