La vandalización de la casa del diputado libertario José Luis Espert que militantes kirchneristas protagonizaron arrojándole caca y poniendo un pasacalles con insultos ya tiene cinco personas detenidas y sigue sumando cuestionamientos y acusaciones cruzadas, principalmente en las redes sociales. Este jueves, uno de los funcionarios más cercanos a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, salió al cruce de quienes cuestionan las detenciones y le reclamó al peronismo que deje de “defender delincuentes”.
Fue Martín Siracusa, secretario de Coordinación Administrativa del Ministerio de Seguridad, quien se metió en la disputa en redes al cuestionar la acusación de Natalia Volosin, una abogada que sostiene que “en la Argentina hay detenciones arbitrarias de opositores políticos al régimen de Javier Milei“.
“Cuando un delincuente detenido está afiliado al peronismo, de golpe es un preso político. Prueben con dejar de defender delincuentes a ver si a dejar de tener tantos entre sus dirigentes”, cuestionó Siracusa en X.
En el mismo posteo, a modo de cierre y con una chicana, le recomendó a Volosin “leer un poco sobre cómo fue la dictadura” para, según él, valorar “profundamente la figura del juez ante una detención”.
Cuando un delincuente detenido está afiliado al peronismo, de golpe es un preso político. Prueben con dejar de defender delincuentes a ver si a dejar de tener tantos entre sus dirigentes.
PD: deberías leer un poco sobre cómo fue la dictadura, si te informaras valorarías…
— Martín Siracusa (@MartinSiracusa) July 3, 2025
El ataque con caca a la casa de Espert derivó en una causa que tiene a su cargo la jueza de San Isidro Sandra Arroyo Salgado y ya cuenta con cinco detenidos. La primera fue Alesia Abaigar, una militante y funcionaria de Kicillof que poco después de declarar fue llevada al penal de mujeres de Ezeiza.
Este miércoles a la madrugada, y tras una serie de allanamientos que incluyeron a la Municipalidad de Quilmes y domicilios particulares en el conurbano bonaerense, Arroyo Salgado ordenó la detención de la presidenta del bloque de concejales de Unión por la Patria de Quilmes, Eva Mieri, una dirigente muy cercana a la intendenta de esa localidad y referente de La Cámpora, Mayra Mendoza.
Además, fueron detenidos Iván Díaz Bianchi, Aldana Sabrina Muzzio y Candelaria Montes, todos “presuntamente involucrados en la planificación y ejecución del ataque”.
Después de una escandalosa sesión en la que diputadas de Unión por la Patria y La Libertad Avanza se insultaron cara a cara, debiendo ser separadas por otros legisladores, los bloques del peronismo y la izquierda dieron una conferencia de prensa en el Congreso para reclamar la “liberación inmediata” de los detenidos.
Secundados por los diputados de ambos espacios, los abogados y familiares de los supuestos involucrados en el escrache en la casa de Espert reclamaron la liberación de los detenidos y cuestionaron a Arroyo Salgado y Bullrich por la magnitud de los allanamientos y las prisiones preventivas.
“La acusación es tirar caca de perro y papeles en la casa de Espert. Podía estar tramitando como una contravención en la Justicia de Faltas, por ensuciar una vereda. Esto no puede suceder en un país en democracia donde rige el Estado de derecho”, aseguró el abogado Diego Molea. “Exigimos la libertad inmediata de las personas detenidas. Vamos a apelar en todas las instancias posibles”, agregó el rector de la UNLZ y ex miembro del Consejo de la Magistratura.
Luego hablaron los familiares de los detenidos. La conferencia de prensa fue en el tercer piso de Diputados, en las oficinas de Germán Martínez, el jefe del bloque de Unión por la Patria. Asistieron legisladores y dirigentes de todos los sectores del peronismo: los diputados Máximo Kirchner, Paula Penacca, Cecilia Moreau, Carlos Castagneto, Lorena Pokoik, Eduardo Valdés y Mónica Macha, los senadores Juliana Di Tullio, Wado de Pedro y Alicia Kirchner, entre otros, y dirigentes como Juan Grabois y Martín Sabbatella. También hubo referentes de izquierda como Myriam Bregman, Nicolás Del Caño, Vilma Ripoll y Cristian Castillo.