La 3° edición del Premio Peabody al Diseño Argentino invitó a pensar “Más allá del Presente: Diseñando el futuro próximo”. Con esa premisa, convocó a anticipar los cambios en el habitar, incorporando la inteligencia artificial y proponiendo soluciones a la crisis medioambiental. Dirigido a estudiantes o recién graduados, pidió que las propuestas materialicen soluciones concretas y viables.
El jurado (compuesto por Victoria Riqué, Camila Offenhenden, Federico Churba, Heidi Jalkh y Guillermo Duodero, gerente de Ingeniería en Peabody) eligió tres ganadores: Manga pastelera, OFF y Vapora. Además, otorgó cinco menciones a Domingo, BurgerLab, AeroGuard, Angle Cook y al Departamento de interiorismo de Peabody, creado por un participante.
Vapora fue diseñado por Ignacio Ballardini, Yago Beghin, Facundo Imoda y Manuel Núñez (de la UBA). Es un climatizador para interiores que usa las propiedades naturales de la cerámica para reducir la temperatura ambiente hasta 4°C, con un gasto de energía significativamente menor que los sistemas convencionales.
“Comenzó como nuestra tesis en Diseño Industrial y nos entusiasmó participar para darle mayor difusión y factibilidad a nuestro trabajo”, comentan sus creadores.
“La innovación principal es climatizar ambientes de manera pasiva, sin consumir electricidad, adaptando una técnica ancestral a un electrodoméstico contemporáneo”, explican.
La factibilidad de producción fue un desafío clave, dada la naturaleza artesanal de la cerámica para lograr una pieza seriada y replicable. “Consultamos diversos talleres y profesionales para evaluar métodos y escalas productivas”, detallan. Y aclaran que no busca competir con los aires acondicionados tradicionales sino complementarlos.
Admiten que la inteligencia artificial fue una herramienta útil para “romper el bloqueo creativo”, aunque enfatizan que “el diseño debe mantener un fuerte componente humano: hay sensibilidades, detalles y decisiones constructivas que hoy solo pueden ser abordadas desde la experiencia y la intuición del diseñador”.
Ante el desafío de la hiperconectividad, OFF es un sistema de control digital proyectado por Ignacio Lúquez (de la Universidad Nacional de Córdoba) para regular el uso de dispositivos móviles con opciones de restricción progresiva y adaptativa, utilizando la IA para desconectarlos.
“OFF propone un dispositivo físico que limita las funciones del celular mediante una red local, sin necesidad de apps, activado voluntariamente por QR”.
Respecto de la factibilidad de materialización, explica que diseñó “un objeto simple y accesible, con materiales comunes y una lógica técnica posible, enfocándose en espacios pequeños”.
Para él, la IA potencia el diseño como herramienta de exploración. “Nos ayuda a llegar más lejos, pero requiere dirección humana para que tenga sentido”.
La Manga Pastelera, creada por Paloma Vázquez (de la UBA), “es un proyecto que repiensa la herramienta más fiel de la pastelería en algo que no sea desechable”.
Con características como la recarga fácil de relleno, limpieza sencilla y un diseño moderno, el electrodoméstico pretende transformar la forma en que interactuamos con la repostería.
“Es una gran innovación como herramienta para pasteleros para ayudar con la fatiga que genera utilizar la manga tradicional durante horas. Tan solo apretando un botón, ya expulsa material”. Paloma aclara que es un trabajo conceptual, por lo que le falta desarrollar la materialidad.
Dice sobre la IA: “ya está en todos los ámbitos de nuestra vida y sería pésima idea evitarla. Es una gran herramienta que vino a aportar mucho al diseño, aunque siempre hay que usarla con responsabilidad”.