Luego de anunciar que “en los próximos días” le pedirá apoyo al Congreso a un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario, Javier Milei volvió a apurar esta noche un entendimiento con el organismo. “Estamos negociando un nuevo préstamo que implica una determinada cantidad de fondos frescos…los fondos los vamos a aplicar a cancelar deuda del Tesoro con el Banco Central y nada más”, dijo en una entrevista con LN+.

Si bien en el Ministerio de Economía y el Fondo mantienen un silencio hermético, fuentes del gobierno aseguran que el acuerdo está “prácticamente cerrado”. “Vamos a tener plata fresca para resolver la deuda del Tesoro con el Banco Central, es el último paso para que el cepo se levante, lo importante es eso, no lo de Santiago Caputo y Facundo Manes”, explicó un funcionario que asistió el sábado al Congreso.

Milei dijo el sábado que el acuerdo con el Fondo le brindará las herramientas para ir hacia un esquema cambiario “más libre y eficiente” y que saldrá del cepo “definitivamente durante este año”, aunque precisó que la estabilidad lograda “tampoco significa que no vaya a haber volatilidad”. Una aclaración que Cristina Kirchner no pasó por alto. “EN MI BARRIO, Y EN ARGENTINA, A ESO LE DECIMOS DEVALUACIÓN“, disparó este domingo en la red X.

La lectura en el PRO es que “el anuncio del acuerdo fue para calmar a los mercados que están ansiosos“. Según Econviews, el Merval cayó más del 20% en dólares en el año, el riesgo país saltó más de 200 puntos hasta 780 y la brecha, que hasta hace unos meses se desplomaba como un piano, ahora necesita de la intervención oficial para no superar el 15%. El informe se titula “el segundo tiempo se complica, que entre el FMI”.

Pese al deterioro de las variables financieras y las señales de agotamiento de los “puentes” construidos para conseguir dólares, los bancos de Wall Street también todavía creen que el acuerdo con el Fondo está cerca de cerrarse. Fue lo que escucharon algunos empresarios argentinos en la 30° conferencia global de finanzas del JP Morgan el miércoles y jueves pasado en Miami.

“Hay un clima de optimismo muy grande, ven que los fundamentos y el programa económico están sólidos y descuentan que el acuerdo con el Fondo Monetario va a salir en las próximas semanas, no hay ruido si sale o no“, dijo uno de los participantes durante el evento cerrado que reunió a 3.000 inversores de todo el mundo en el hotel de lujo Loews.

Se discutió sobre los aranceles de Donald Trump y su impacto en el crédito, el freno en la baja de tasas de la FED y la situación de los mercados emergentes. Si bien México y Brasil fueron el foco de atención, los bancos y energéticas argentinas se hicieron un lugar, como Pampa Energía y Genneia, y el titular de Poliarquía, Alejandro Catterberg, habló en un panel sobre la consolidación del gobierno de cara a las elecciones legislativas.

El JP Morgan es el banco más grande de Estados Unidos y uno de los mayores del mundo, por lo que su veredicto es importante para la Argentina. Luis Caputo, exjefe de trading para América Latina del JP Morgan Chase entre 1994 y 1998, cerró en enero un préstamo REPO por US$ 1.000 millones con ese banco y otros cuatro para afrontar el último pago a los bonistas. Sin embargo, desde entonces el mercado entró en un pozo del que aún no puede salir.

En ese marco, al que se suman los problemas para acumular reservas y la seguidilla de errores no forzados (como el escándalo de $ Libra y la designación por decreto de dos jueces de la Corte), “el acuerdo con el FMI, que hasta hace poco parecía sin apuro, ahora se volvió más urgente“, dijo Econviews. Y estimó que sería clave para reducir el riesgo país y levantar las restricciones cambiarias. El Morgan Stanley ya dijo que el desembolso inicial no superaría los US$ 5.000 millones.

Si bien el JP Morgan sigue proyectando un rebote de la actividad del 5,5% en 2025 y calcula un superávit comercial de US$ 14.000 millones, Wall Street ve con inquietud el frente cambiario. Como anticipó Clarín, el banco Citi advirtió días atrás que la suba del dólar por detrás de la inflación genera “efectos secundarios”, como el riesgo de un nuevo salto cambiario, y estimó que la baja del crawl al 1% mensual refleja un alto convencimiento de acordar con el Fondo.



Fuente Clarin.com

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *