Iban 40 minutos del segundo tiempo del clásico ante Brasil de este martes por la noche cuando Lionel Messi, desde Miami, tomó su teléfono y comenzó a grabar la pantalla de su televisor. Las imágenes devolvían un contundente 4-1 de la Selección Argentina en el estadio Monumental y el capitán albiceleste, enloquecido con el fútbol total de la Scaloneta, no pudo resistir la tentación de publicar una historia de Instagram felicitando a sus compañeros.
El rosarino, quien por una lesión muscular se ausentó tanto de este partido como de la anterior victoria obtenida en Montevideo ante Uruguay, en una doble fecha en la que el representativo argentino consiguió la clasificación hacia el próximo Mundial, rubricó cinco emojis con aplausos para graficar su felicidad por el resultado en Buenos Aires.