Facundo Manes brindó una extensa entrevista televisiva este lunes, luego del escándalo con Santiago Caputo tras el discurso del presidente Javier Milei en la Asamblea Legislativa. El diputado ratificó todo lo que contó en redes sociales poco después del cara a cara con el asesor presidencial. “El hombre más poderoso de la Argentina me amenazó”, afirmó. Y agregó: “Vino con una patota”.
Manes expresó su preocupación por el manejo del asesor presidencial de los servicios de inteligencia, la AFIP y los trolls en las redes sociales.
“Me amenaza la persona con más poder que el Presidente, me dice que lo voy a escuchar, y otras cosas que voy a contar en la denuncia”, dijo en A24, en referencia a la presentación judicial que realizará el miércoles.
También se refirió a los dichos del asesor presidencial. “Me dijo básicamente que me va a tirar todo el Estado encima, me dijo que lo iba a a escuchar, que yo no estoy limpio. Me dijo eso: ‘Vos no podés hacer eso que hiciste, porque para hacerlo vos tenés que estar limpio’. Yo le respondí que estoy limpio”, profundizó Manes.
Además, reiteró que fue golpeado en el cara a cara con Santiago Caputo, cuando bajó directamente a increparlo.
“Si le pasa a un dipuntado de la nación, esto le puede pasar a un periodista honesto que investiga al poder, a un policía honoesto quiere desarmar a la policía orrupta, si a un diputado con la Asamblea Legislativa, con las cámaras, lo amenazan y le pegan”, reiteró.
El legislador de Democracia Para Sirmpre realizó un relató detallado de todo lo ocurrido en el Congreso, tras la apertura de sesiones por parte del mandatario.
Manes habló de un clima “hóstil” en el recinto a partir de la ausencia del peronismo, del kirchnerismo y con la presencia de diputados libertarios y otros “colabioracionistas” con el oficialismo, y “las gradas llenas de funcionarios, libertarios jóvenes, trolleros, como en la época k”.
Luego contó que cuando Milei habló de la Justicia le preguntó respecto al escándalo de las criptomonedas y que le mostró la Constitución Nacional por la designación por decreto de Manuel García-Mansilla y Ariel Lijo para integrar la Corte Suprema de Justicia.
Allí fue cuando advirtió que Santiago Caputo le comenzó a gritar “desaforado” desde donde estaba y que se comenzaron a mirar.