Cada 4 de julio se celebra el Día de la Independencia en Estados Unidos. La fecha se festeja en todo el país con desfiles, conciertos, fuegos artificiales y reuniones en las que se comen platos tradicionales del país norteamericano.
Estados Unidos fue uno de las primeras naciones del continente americano en independizarse de una potencia europea, después de que las Trece Colonias, reunidas en varios “congresos continentales”, declararan su independencia de Gran Bretaña en 1776. Sin embargo, el proceso de emancipación comenzó muchos años antes.
El 4 de julio de 1776, 56 diputados de las colonias inglesas en Estados Unidos firmaron en Filadelfia el Acta de Declaración de la Independencia. Algunas de las personalidades destacadas en el proceso de emancipación fueron Thomas Jefferson, Benjamín Franklin, John Adams y Roger Sherman.
La independencia de Estados Unidos no fue repentina. Comenzó con la llegada de los primeros colonos británicos a Jamestown, Virginia, en 1607. Para mediados del siglo XVIII, las Trece Colonias británicas a lo largo de la Costa Este ya se habían establecido.
Más de 150 años después, en 1774, representantes de las Trece Colonias se reunieron en secreto en el Primer Congreso Continental en Filadelfia, Pensilvania tras descontentos por el aumento de impuestos. Además, para ese entonces, las colonias ya habían desarrollado un sentido de identidad colectiva. En ese encuentro, participaron figuras como George Washington, John y Samuel Adams.
Al año siguiente, representantes de las Trece Colonias se reunieron en el Segundo Congreso Continental, también en Filadelfia, donde un grupo de los hoy considerados padres fundadores de los Estados Unidos expuso el Acta de Declaración de la Independencia. Fue aprobada por unanimidad por los 56 diputados del Congreso. Y dos días más tarde, el 4 de julio, fue firmada por todos los presentes.
Trece años después de la firma del Acta de Declaración de la Independencia y tras la ratificación de la Constitución, George Washington asumió la presidencia convirtiéndose en el primer presidente de los Estados Unidos. Fue elegido en 1789 y sirvió hasta 1797. Además de ser el primer presidente, también es ampliamente reconocido como uno de los “Padres Fundadores” de la nación y líder militar durante la Guerra de Independencia.
La inclusión de los fuegos artificiales en las festividades del 4 de julio tiene raíces históricas. Fue el mismísimo John Adams, segundo presidente de los Estados Unidos y uno de los Padres Fundadores, quien en una carta a su esposa sugirió que el día de la independencia se celebrara con desfiles, espectáculos y fuegos artificiales.
Su visión se materializó por primera vez en 1777, cuando la independencia de Estados Unidos fue conmemorada de esta manera. Desde entonces, el cielo nocturno del 4 de julio se ilumina con exhibiciones pirotécnicas.
La celebración del Día de la Independencia no estaría completa sin su característica gastronomía. Las parrilladas y barbacoas son el corazón de las reuniones al aire libre, con los hot dogs, hamburguesas y costillas a la BBQ como protagonistas. Para el postre, la clásica tarta de manzana es una elección infaltable.