La decisión del Gobierno Nacional de permitir el ingreso de carne con hueso y material genético bovino desde el norte hacia el sur de la barrera sanitaria generó el rechazo de los Gobernadores de esa región y del sector productivo. En una carta firmada por más de 70 cabañas de las provincias del sur, los criadores de razas bovinas expresaron su preocupación y decepción por las medidas tomadas.
“De un día para el otro vemos como se cae el trabajo realizado durante todo este tiempo. Fueron muchos los años de lucha y control de la Fiebre Aftosa para lograr que parte del territorio nacional hoy sea LIBRE de esta enfermedad con prevalencia mundial; años de vacunación, de limitar zonas buffer, de no poder ingresar animales de otras regiones, de cuarentenas para el ingreso de animales a la zona buffer, de un montón de exigencias que se cumplieron con el propósito de ir mejorando nuestro estatus sanitario”, declararon.
La Resolución 180/2025, que lleva la firma del titular del Senasa, Pablo Cortese, permite el ingreso de carne con hueso y material reproductivo a la Patagonia, o sea, desde las zonas libres de Fiebre aftosa con vacunación hacia una región que no se aplica la vacunación. El objetivo central de esta norma, según explicaron desde el Gobierno, era bajar los valores de la carne en el sur del país, que había crecido por encima que la del resto del país. Pero tras la presión de los gobernadores y del sector productivo se decidió prorrogar por 90 días la entrada en vigencia de la norma.
“Nos viene a la memoria cómo nos tuvimos que reinventar y comenzar a proveer de genética a nuestra región. (…) Nuestra actividad tuvo un crecimiento exponencial posicionando a la Patagonia como la única región del país con posibilidades de exportar material genético, animales en pie y carne a países Libres de Fiebre Aftosa”, destacaron los cabañeros de la Patagonia.
En la misma linea el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck”, había declarado: “El Gobierno Nacional impone una resolución que destruye lo que miles de productores construyeron con esfuerzo durante dos décadas. La Patagonia es zona libre de fiebre aftosa sin vacunación gracias al trabajo de nuestros ganaderos y frigoríficos, pero ahora, desde un escritorio en Buenos Aires, un burócrata pretende borrar todo de un plumazo para favorecer a los grandes supermercados y exportadores”.
Ahora, tras la prórroga, Rolando Figueroa, gobernador de Neuquén, explicó que se estableció una mesa de trabajo con los gobernadores de la Patagonia bajo tres preceptos fundamentales: trabajar junto a los productores para potenciar las economías regionales, establecer normas específicas que salvaguarden la sanidad y el estatus sanitario, y lograr coherencia en el establecimiento de precios para que los consumidores no sean los principales perjudicados.
“Nuestro objetivo es reducir los precios de la carne, pero para lograrlo, no podemos comprometer el estatus sanitario que hemos alcanzado en nuestra región y debemos proteger a los productores que reciben muy poco, a pesar de haber cuidado durante 20 años dicho estatus”, sostuvo.
Para el Gobernador de Río Negro, si el objetivo real es mejorar el estatus sanitario del país, la solución es clara: “Levanten la vacunación en todo el territorio nacional y tengamos un solo estándar sanitario. Destruir la barrera sanitaria de la Patagonia no es el camino”, arremetió.
Los cabañeros de la Patagonia agregaron: “El gran interés por la genética argentina es una realidad y con estas medidas lo único que logramos es desaprovechar y perder el mercado de aquellos países con igual estatus sanitario que hoy demandan los reproductores y material genético de alto valor productivo que se crían en la Patagonia. Consecuentemente nos privamos de ingresos económicos que favorecen al país y a nuestro sector en particular. Trabajemos para lograr que nuestra Argentina sea libre en su totalidad”.