Nicolás Edwin, cronista de la señal LN+, intentaba hablar con el presidente Javier Milei, cuando este llegaba al acto de cierre de campaña del vocero y candidato de La Libertad Avanza en la Ciudad, Manuel Adorni. De pronto, en medio de la muchedumbre que rodeaba al Presidente, se escuchó un lamento: al periodista le robaron el teléfono. La situación quedó registrada en la transmisión en vivo.
Tras bajar del auto en Recoleta, Milei se abría paso entre la multitud para subir al escenario. Lo ayudaba un equipo entero de guardias de seguridad. También abundaban las cámaras y flashes, en busca de un testimonio presidencial. De repente, en vivo se escuchó la voz del periodista: “Me robaron el celular, me robaron el celular”.
Desde los estudios de la señal atinaron a responderle: “No se puede creer, Nicolás”.
“No puedo creer que me robaron mi teléfono”, insistió el cronista ante la indignación y el asombro con el que sus compañeros desde estudios se hacían eco de lo sucedido.
“Mi herramienta de trabajo”, volvió a lamentarse Edwin, quien de inmediato usó a Cristina Pérez, conductora del segmento del canal como receptora de su descargo de bronca y tristeza en cuotas.
“Lo sigo pagando, Cristina. Me lo sacaron del bolsillo… Hay muchísima gente acá, es imposible trabajar. Se lo pasaron de una mano a la otra”, siguió relatando el periodista, mientras Pérez repetía “no lo puedo creer” y “qué desastre”.
Mientras tanto, al aire el canal continuaba mostrando cómo Milei intentaba llegar al escenario a través de una verdadera multitud.
“Muy rápido fue”, describió, al tiempo que se cuestionó a sí mismo en voz alta el hecho de haberlo llevado con él en ese contexto.
Pérez le solicitó a la producción liberar a Edwin para que busque su teléfono y fue el mismo cronista el que le respondió, siempre al aire: “Es imposible, Cristina, es imposible”.
“Dios mío… bueno, hacemos desde acá el llamado, por favor que si alguien puede hacer algo con este tema… no lo puedo creer”, expresó Pérez primero con iniciativa y luego con resignación.
A continuación, desde el estudio del canal la conversación giró hacia el riesgo que asume el Presidente al “meterse entre la multitud”. “Es un riesgo para él y para la gente que está alrededor… y ni hablar Nico”, añadió otra periodista sentada al lado de la conductora.
Emilia Orozco, diputada nacional libertaria e invitada al programa, opinó sobre esa costumbre del jefe de Estado y aprovechó para solidarizarse “con el trabajador de la prensa”. Además, coincidió con la dificultad de distinguir, según ella, quiénes son militantes y quiénes “van a arrebatar teléfonos”.
El debate continuó por otros temas y la transmisión mostró cómo Milei, minutos más tarde, finalmente logró llegar al escenario.