Tras haber atravesado un juicio público que recorrió el mundo y la puso en el centro de la atención mundial el año pasado, Gisèle Pelicot hará oír su voz en un libro que se titulará Un himno a la vida y será publicado por Lumen el año próximo.

El Grupo Penguin Random House (al que pertenece Lumen) también anunció que adquirió los derechos de publicación mundial en español, merced a un acuerdo con la agente literaria Susanna Lea y que el libro saldrá en español junto con la edición francesa, al tiempo que se publicará en simultáneo en otros 20 idiomas.

La intención de Un himno a la vida, según la fuente, es escuchar la voz de esta mujer que a los 72 años supo de la manera más brutal que su marido, Dominique Pelicot –condenado a 20 años de prisión en diciembre pasado– la había violado y hecho violar por un centenar de individuos que contactaba por internet durante una década.

Si algo definió a Gisèle Pelicot a lo largo del juicio, en el que hizo famosa su frase “que la vergüenza cambie de bando”, por lo que tanto la opinión pública como el periodismo pudo verla al ingreso y salida de los Tribunales de Avignon, es que nunca asumió una conducta de rabia o resentimiento contra su agresor. Por lo que el libro procurará brindar “consuelo y esperanza y contribuirá positivamente a modificar la narrativa sobre la vergüenza y a cambiar el mundo”, según señala el comunicado de Lumen.

Quizá la estupefacción y el shock por la pesadilla que le fue revelada haya sido más fuerte.

En 2024, Gisèle Pelicot eligió no revictimizarse y dio la cara. El horror de lo vivido, que se fue destapando en el juicio como capas de una cebolla, al mostrarse los hechos tal y como eran, fue inspirador para miles de mujeres. Fue un ejemplo de dignidad y de valentía al rechazar mantenerse en el anonimato y mostrar su rostro.

Salvo al final, donde hizo una breve declaración agradecida a los medios que siguieron el juicio y a la gente de a pie que la acompañó en cada audiencia, Gisèle Pelicot no concedió entrevistas ni acudió a la TV para dar su versión de los hechos.

Quien sí lo hizo fue su hija Caroline Darian, en un libro durísimo titulado Y dejé de llamarte papá, en el que obviamente la perspectiva es la de una hija defraudada que no entiende cómo gestionar el alud que le ha caído encima al mostrar la cara oculta de su padre: un criminal perverso y sin escrúpulos, pues aun durante el juicio continuó mintiendo.

Darian estuvo siempre convencida de que su padre también la violó por lo que hace este mes presentó una denuncia penal en su contra y acaba de publicar un nuevo libro titulado Para que recordemos.

En el nuevo libro Darian abre el dique del enojo contra su madre porque no acompañó su denuncia y por “no querer creer ni oír” que ella también fue víctima del “monstruo de Avignon”.

Las múltiples violaciones sufridas por Gisèle Pelicot –por las que la justicia francesa condenó a su exmarido y a 50 varones más a quienes se les pudieron probar los delitos de violación– le dejaron consecuencias en su salud.

El poder de su mensaje es innegable porque animó a otras mujeres a comprender los efectos de la llamada sumisión química, a la vez que puso foco sobre la necesidad de que el sistema de salud y los médicos puedan detectar a tiempo esta sumisión química a la que muchas mujeres son sometidas en el mundo con el fin de violarlas. Hay análisis específicos que la revelan, pero que habitualmente no se realizan en los hospitales y clínicas sin una orden clínica específica.

Pelicot fue elegida la persona más destacada del año 2024 en un sondeo de opinión de Francia y fue homenajeada por la revista Time. Para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, el periódico británico The Independent la nombró la mujer más influyente de 2025.

Gisèle Pelicot ha declarado: “Estoy inmensamente agradecida por el increíble apoyo que he recibido desde el principio del juicio. Ahora quiero contar mi historia con mis propias palabras. A través de este libro espero transmitir un mensaje de fortaleza y valentía a todos aquellos que se ven sometidos a terribles adversidades. Que nunca sientan vergüenza. Y que, con el tiempo, vuelvan a aprender a disfrutar de la vida y encuentren paz”.

Sin duda el libro abrirá un debate pues su actitud parece ser diametralmente opuesta a la de Caroline, su única hija mujer (tiene además dos hijos varones), quien en su segundo libro se pone abiertamente contra su madre y no está dispuesta a perdonar.

Según la directora literaria de Lumen, María Fasce, “la valentía y la dignidad de Gisèle Pelicot alumbran un cambio de paradigma”. El nombre de Pelicot se sumará así a los de Toni Morrison, Simone de Beauvoir, Umberto Eco, Jeanette Winterson, Rebecca Solnit, Hanya Yanagihara y Vanessa Springora, entre otros.





Fuente Clarin.com

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