Entran más productos de Asia y las marcas chinas avanzan en los rubros de celulares, autos y ropa. Buscan competir en precio y suman importadores.
Según el Indec, en el primer bimestre de 2025, las compras al gigante asiático crecieron 73,5% interanual. Fueron por US$ 3.024 millones y aumentaron en US$ 1.118 millones. El intercambio dejó un saldo negativo de US$ 2.365 millones y marcó el mayor déficit con los socios comerciales.
China fue el país al que la Argentina más le compró: representó un 26% del total. La entrada de bienes de consumo subió 126,7% e implicó US$ 523 millones, mientras que la de teléfonos y computadoras aumentó 152% y significó US$ 135 millones. En tanto, el ingreso de vehículos incrementó 66,9% y fue por US$ 53 millones.
Celulares, autos y ropa de origen chino
Con Samsung y Motorola como los jugadores más importantes −concentran más del 70% del mercado argentino y alrededor del 50% en América Latina−, para los teléfonos chinos, la oportunidad se presenta en el crecimiento de la venta de los más accesibles: en el tercer trimestre de 2024, los de menos de US$ 200 acapararon el 49% del volumen regional, según Canalys.

Al arribo de los Oppo, Infinix, Nubia y Tecno −que luego de importarse inicialmente, ahora se fabrican y comercializan en Tierra del Fuego con socios locales como Newsan, BGH e Ifresa−, se suman los Honor. Llegaron a Diggit, la cadena de electro de Mirgor, que cuenta con 19 locales. Ofrece cuatro modelos.
Honor nació en 2013 como paraguas de Huawei, hasta que la vendió en 2020 a Shenzhen Zhixin New Information Technology Co., Ltd. En 2024, entró en el top-5 de las marcas más vendidas de la región, detrás de Samsung, Motorola, Xiaomi y Transsion (dueña de Tecno). Logró una cuota del 7% y un crecimiento interanual del 293%.
También en el segmento premium ven oportunidad. Xiaomi −tercera en ventas globales, detrás de Apple y Samsung− amplió su oferta con la llegada del Xiaomi 14T, de cuatro cámaras. Al local del Abasto Shopping, sumó uno en Unicenter y otro en Palmas del Pilar. En 2024, pasó de tener un 5% del mercado argentino a un 9%. Planea cerrar 2025 con un 15% y lanzar más modelos.

Según la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara), nueve de las 40 marcas más vendidas son chinas, por el impulso de la expansión de SUV y utilitarios livianos.
Esta semana, mediante Grupo Empresario Prieto, desembarcó Maxus, perteneciente a Saic Motor, con camionetas que quieren hacerle frente a las pick-ups nacionales. Se presentó la Maxus T90, la primera 100% eléctrica que se vende aquí. Más adelante, vendrán otras para abastecer a empresas de logística.
También Grupo Antelo apuesta fuerte con Great Wall Motor. Maneja Haval, que, según Acara, tuvo una suba interanual del 4.433% de patentamientos. El modelo H6 fue, por noveno año consecutivo, el SUV más vendido de China. A Uruguay llegó el híbrido y se están haciendo las homologaciones para que arribe a la Argentina, donde se ofrece con motor a combustión.
Otras submarcas son Poer y Tank, que ya se venden en el país y en China poseen el 50% del mercado de pick-ups y del segmento offroad, respectivamente.

La industria sigue de cerca el antecedente de Brasil. El país vecino encabeza la avanzada asiática en la región, con un aumento del 30% en importaciones de autos en 2024. Es el número más alto en los últimos 10 años, según la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automóviles de Brasil (Anfavea).
De acuerdo a fuentes del sector de indumentaria, en el primer bimestre la importación de China aumentó 47% interanual medida en dólares. En unidades, fue un 136% más. Esperan que la cifra crezca con la rebaja de aranceles que se dispuso.

Con costos de producción en alza, adoptan la estrategia especialmente las que venden prendas básicas. Otras como Zara, que si bien siempre importó de Marruecos y Turquía, también amplían el surtido. Sumó otros países asiáticos como Camboya, India y Pakistán. Lo mismo ocurre con las más conocidas de zapatillas.
Para Marcelo Elizondo, especialista en comercio exterior, “la Argentina fue una de las tres economías más cerradas en 2024, y sigue siéndolo”. “Para que tenga importaciones equivalentes al promedio mundial tiene que duplicarlas: pasar del 14% que representan de su PBI al 30% del Producto Bruto Mundial. Las empresas deben adecuarse para competir”, señaló, y aclaró que el Gobierno debe acompañar la apertura con mejoras en la macro que faciliten la operación, baja de impuestos y eficientización de la burocracia pública”.