Después de denunciar corrupción y en medio de su pelea con Gustavo Petro, la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, publicó este jueves una carta alarmante. A través de esa declaración, denunció que recibió amenazas contra ella y contra su familia. “Hoy mi vida corre peligro”, sostuvo Márquez.
La vicepresidenta fue una de las funcionarias más críticas de Petro el 4 de febrero, cuando el mandatario transmitió en vivo por televisión y redes sociales un consejo de ministros. Márquez, que además era ministra de Igualdad (renunció el miércoles), mostró su molestia por la presencia en el gabinete de personas que considera corruptas y ajenas a su proyecto progresista.
Este jueves, tres semanas después de la exposición de esa interna, publicó una extensa carta en sus redes sociales.
“Siempre he hablado con transparencia y con la verdad, nunca he guardado silencio. Porque la lealtad no es callar, la lealtad es advertir cuando el rumbo se desvía del camino, de la gente. No me malinterpreten, mi compromiso con el pueblo sigue intacto, y cuando señalo lo que considero que no está bien en nuestro gobierno, no es para destruir, sino para construir un camino más firme y honesto”, dijo Márquez.
“Hoy mi vida corre peligro. Denunciar la corrupción y señalar lo que está mal tiene consecuencias”, escribió la vice de Colombia, sin especificar si se refería a ese hecho.
“Por haber dicho estas verdades intentan y seguirán intentando enredarme en escándalos y en maniobras políticas en mi contra que únicamente buscan dañar mi imagen”, añadió.

Petro y Márquez, una relación deteriorada en Colombia
La relación de Márquez y Petro parece haberse deteriorado tras su elección como binomio en 2022.
La vicepresidenta rechaza la llegada a la cúpula del gobierno de Armando Benedetti, un excongresista aliado de la derecha y exdiplomático que ayudó a Petro a llegar al poder.
Investigado por corrupción y denunciado por presunta violencia de género, Benedetti será oficializado este jueves como nuevo ministro del Interior.
Su cercanía con Petro y el anuncio de su designación generaron un terremoto al interior del gabinete que salió a la luz ante millones de personas gracias a la transmisión del consejo de ministros.
Otros funcionarios se unieron a los reclamos de Márquez. Pero el presidente, que defiende a su nuevo ministro a rajatabla, respondió pidiendo la renuncia de todo el gabinete.
Se espera que este jueves se conozca el nombre del sucesor de Márquez como ministra de Igualdad.
El consejo de ministros también desembocó en la revelación del presunto ingreso de dinero a la campaña presidencial de Petro por parte del mayor contrabandista del país.
El autor de la denuncia, Augusto Rodríguez, un funcionario y viejo aliado de Petro, publicó una carta dando a entender que lo podrían asesinar y hacer pasar su muerte como un suicidio.
“No estoy deprimido, no suelo atentar contra mi propia integridad y gozo de buena salud”, escribió el funcionario.
Márquez llegó a la vida política tras una larga trayectoria como activista y defensora del medio ambiente en su natal departamento del Cauca (suroeste).
Por ese trabajo ha sido víctima de atentados. Incluso siendo vicepresidenta las autoridades descubrieron en 2023 un plan para asesinarla con explosivos.
La carta completa de Francia Márquez
Colombianas, colombianos. Vine a este gobierno para trabajar por la igualdad, la equidad y la justicia social. No por la burocracia, ni por la politiquería, ni por los intereses que han frenado el verdadero cambio.
Desde el primer día asumí el reto de construir una institución, a mi no me entregaron una creada. Me tocó poner el primer ladrillo, porque el ministerio era solo un papel. Lo hice con convicción y con la esperanza para cambiar la vida a millones de personas, pero cuando el compromiso no viene acompañado de las herramientas necesarias, el camino se vuelve más difícil.
A pesar de esto, hoy el Ministerio de Igualdad y Equidad deja bases sólidas: 24 programas para el cierre de brechas y la garantía derechos, diseñados y en ejecución. A la fecha, más de 15.800 jóvenes son parte del programa Jóvenes en Paz; la línea 155 Salvia ha atendido a más de 19 mil mujeres victimas y en riesgo de violencias de género; Hambre Cero ha llevado más de 50 mil toneladas de alimentos a las zonas más vulnerables.
Siempre he hablado con transparencia y con la verdad, nunca he guardado silencio. Porque la lealtad no es callar, la lealtad es advertir cuando el rumbo se desvía del camino, de la gente. No me malinterpreten, mi compromiso con el pueblo sigue intacto, y cuando señalo lo que considero que no está bien en nuestro gobierno, no es para destruir, sino para construir un camino más firme y honesto.
Hoy, mi vida corre peligro. Denunciar la corrupción y señalar lo que está mal tiene consecuencias. No me han atacado con argumentos, sino con amenazas contra mi vida y la de mi familia. Aún así, no me callarán. No me rendiré. Porque el cambio que prometimos, no será frenado por el miedo.
Hoy por haber dicho estas verdades, intentan y seguirán intentando enredarme en escándalos o en maniobras políticas en mi contra que únicamente buscan dañar mi imagen.
La corrupción no tiene cabida en el cambio que prometimos.
Como dijo Bolívar: “Más cuesta mantener el equilibrio de la libertad que soportar el peso de la tiranía”, y cuando el gobierno cede ante el chantaje de quienes susurran en la sombra, es el país entero el quien termina pagando el precio.
Mi compromiso con Colombia no termina por estar dentro o fuera de un ministerio. Seguiré trabajando por la gente y no me detendré hasta llevar la igualdad y la equidad a cada rincón de Colombia.
Hasta que la dignidad se haga costumbre.