Lo que antes era considerado un descarte industrial, hoy se convirtió en un recurso muy valorado por quienes apuestan al reciclaje, la decoración sustentable y las ideas creativas. Los pallets de madera, esos bastidores usados en depósitos y envíos de carga, ahora son sinónimo de versatilidad y estilo rústico.
Cada vez más personas en Argentina se suman a esta tendencia: transforman pallets en muebles, maceteros, escritorios y huertas verticales, dándoles una segunda vida útil. A la vez que decoran sus casas, cuidan el planeta y, en muchos casos, hasta generan ingresos con pequeños emprendimientos DIY.
Los pallet ofrecen una madera resistente, económica y muy fácil de reutilizar. Si tenés uno (o varios) en casa, estás ante una materia prima valiosa que podés convertir en objetos útiles y originales.
Desde quienes buscan ambientar su casa con bajo presupuesto hasta quienes quieren comenzar un pequeño negocio, los pallets se convierten en el punto de partida ideal. Además, al ser elementos reciclados, contribuyen al cuidado del ambiente y fomentan un consumo más responsable.
Apilando dos o tres pallet, lijándolos y barnizándolos, se puede armar una base firme para un sofá. Sumale unos cojines grandes y ya tenés un sillón cómodo y canchero para tu patio o balcón.
Ideal para dormitorios juveniles o habitaciones de estilo industrial. Se usan varios pallet como base, dejando un diseño moderno, rústico y funcional.
Un par de pallet con ruedas o patas metálicas se transforman en escritorios o mesas bajas con onda. Pueden usarse en livings, estudios o hasta como mesa ratona.
Colgando un pallet entero en la pared podés tener un organizador para herramientas, utensilios de cocina, botellas o macetas. Una solución decorativa y práctica.
Con tierra, macetitas y un poco de creatividad, un pallet se convierte en una huerta para aromáticas o flores. Perfecto para balcones o patios chicos.