Gonzalo González, un vecino de Lomas de Zamora es carpintero y fábrica muebles. Su profesión dio un giro radical cuando se viralizó uno de sus trabajos en las redes sociales.
El hombre de 42 años llevó una de las mesas ratonas que más vende desde Banfield hasta San Miguel, en zona oeste. Hizo más de tres horas de viaje en colectivo para llevarla hasta el comprador y se hizo viral cuando el cliente hizo una publicación en Facebook para agradecerle.
“En el día de ayer hice una compra por market de la mesita que se ve en la foto y con el permiso de él presumo su trabajo lo que más me sorprendió y por eso este posteo que hoy al llegar con la mesita a pie me entero que se vino viajando en transporte publico desde Banfield hasta San Miguel solo por esta venta sin tener intenciones de cobrarme aunque sea el envío y ahí es cuando ves las ganas que uno tiene de salir adelante”, expresó el hombre en la publicación que acompañó con una foto de Gonzalo y la mesa.
La publicación fue compartida por más de 60 mil personas. Desde ese momento, su suerte cambió de forma repentina. “Es increíble lo que está pasando. Veo algunos comentarios, pero no tengo tiempo de verlos todos porque de verdad son muchísimos y en distintas redes. Es muy lindo, me da orgullo que se esté viralizando el trabajo, entender que el esfuerzo tiene sus recompensas. Yo sé que tal vez la mesa en venta al público en otros lugares está más cara, que yo la tengo más económica que otros, pero fue mi manera de poder llegar a los clientes que yo buscaba”, explica el carpintero.
Y agrega: “Sería bueno que estas cosas ayudaran a cambiar la mentalidad de muchos chicos que hoy se quedan en sus casas y no hacen nada porque sienten que no hay esfuerzo que valga la pena. Cualquier esfuerzo por mínimo que sea va a tener una gratificación por lo menos personal, hay que hacer hasta que en algún momento puedas ver la siembra de lo que cosechás”.
La mesa viral sale $22.000 con envío incluido, y tiene un pequeño espacio de guardado que le da una funcionalidad extra. “También hago la mesita clásica, mesas de luz, y otros muebles. Antes de la viralización vendía tres mesas en 15 días. Ahora tengo todo el mes completo de pedidos. Son alrededor de 150, y siguen llegando mensajes. Estoy muy agradecido”, dice el creador de mueblesquimig.
Desde muy chico, Gonzalo estuvo familiarizado con el oficio. “Mi tío Miguel es carpintero y yo siempre hice algunos muebles para amigos y conocidos. Soy programador y hace unos meses quería hacer algo diferente, algo tangible. Hice la famosa mesita, pero tenía un costo más elevado y me resultaba difícil vender. Luego hice ajustes en el precio, la publiqué y se empezó a mover. Fui a la Escuela Técnica 1 de Lomas, ahí tuvimos carpintería, hicimos algunos trabajos, aprendimos de madera, pero hasta ahora no me había involucrado en el área”, cuenta.
La idea del vecino de Lomas de Zamora es poder capitalizar el auge de su producto. “No quiero que sea simplemente suerte de un día. Estoy trabajando con un chico que me ayuda a poder cumplir con los pedidos, me conoció a través de la publicación y me da una mano con muchas cosas. Ambos vamos aportando nuestros conocimientos. Me gustaría agrandar el taller y crecer a gran escala, ahora estamos trabajando en el comedor de la casa de mi hermano. Me llama la atención la solidaridad de la gente, una chica me llamó para donarme las herramientas que eran del papá. Me falta un lugar donde poder poner herramientas, organizar el trabajo y seguir creciendo. Estoy súper agradecido”.