Esta es la forma en la que una persona mentirosa escribe la letra S, según la grafología

Las palabras pueden engañar, pero la escritura deja rastros. Aunque no lo notemos, cada letra que trazamos sobre el papel es una firma inconsciente de quiénes somos. La grafología sostiene que ciertos patrones en la forma de escribir pueden revelar rasgos profundos de la personalidad, y uno en particular llamó la atención de los expertos: la manera en que una persona dibuja la letra S podría ser un indicio de deshonestidad.

No estamos hablando de una ciencia exacta ni de un detector de mentiras infalible, pero sí de un análisis que puede sacar a la luz hábitos ocultos. ¿Cómo traza la “S” una persona que miente? ¿Hay señales claras en la escritura que revelen a un experto en verdades a medias? Acá te contamos lo que dicen los grafólogos y la psicología.

Antes de entrar en la escritura, es clave entender qué características suelen repetirse en personas que mienten con frecuencia. Desde la psicología, se sabe que quienes engañan de manera habitual experimentan cierto nivel de estrés o ansiedad al hacerlo, lo que se refleja en su lenguaje corporal, tono de voz y, sí, también en su escritura.

Según el portal Psicología-Online, algunas señales comunes en personas que suelen mentir incluyen:

• Inseguridad y baja autoestima.

• Tendencia a victimizarse cuando son descubiertos.

• Negación constante, incluso ante pruebas evidentes.

• Uso excesivo de gestos con las manos al hablar.

• Falta de empatía en situaciones clave.

• Impulsividad: algunos mienten por reflejo, sin siquiera planearlo.

• Astucia y manipulación en casos más calculadores.

Estos rasgos pueden expresarse en distintos aspectos del comportamiento, y la grafología sugiere que la escritura es uno de ellos.

La grafología estudia la escritura para detectar patrones de personalidad. En este contexto, la letra S es clave porque está asociada con la comunicación y la sinceridad. Según expertos, hay ciertos trazos que podrían ser indicios de deshonestidad o manipulación.

Cuando los bucles de la “S” son grandes o demasiado marcados, puede indicar que la persona tiende a exagerar o dramatizar la realidad. Es común en quienes adornan sus relatos con detalles irreales para llamar la atención.

Si la “S” aparece con trazos irregulares o deformados, podría reflejar una tendencia a evitar la verdad o manipular la información. Es típica de personas que dan muchas vueltas antes de ser directas o que buscan confundir al otro con su discurso.

Una “S” con ángulos muy marcados o puntas filosas sugiere una tensión interna. En algunos casos, se asocia con agresividad pasiva, lo que significa que la persona puede ocultar cosas, pero a la vez sentirse incómoda con eso.

Si bien la grafología es una herramienta interesante para analizar la personalidad, no es una ciencia exacta. La forma de escribir puede variar por múltiples razones: el estado emocional, la postura, el tipo de birome o incluso el apuro.

Sin embargo, los expertos sostienen que cuando ciertos patrones se repiten de manera constante en una persona, pueden dar pistas sobre su forma de ser. Y, al parecer, la “S” tiene mucho más para decir de lo que imaginamos.