Con la tensión generada por una nueva marcha de jubilados frente al Congreso y el recuerdo fresco del escándalo ocurrido la semana pasada en el recinto, la Cámara de Diputados le dio un triunfo al Gobierno al aprobar y dejar firme el DNU 179/25 que el presidente Javier Milei rubricó por el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El decreto fue apoyado por 129 votos positivos, 108 en contra y 6 abstenciones. El oficialismo contó con el acompañamiento del PRO, que comanda Cristian Ritondo, de la UCR, Coalición Cívica y un apoyo parcial de Encuentro Federal, el espacio que lidera Miguel Angel Pichetto. También sumó el respaldo de Innovación Federal, el espacio que preside Pamela Calletti y que integran representantes de Salta, Misiones y Río Negro, como los tres tucumanos que responden al gobernador Osvaldo Jaldo.
De esta manera, el DNU que avala el acuerdo con el organismo internacional de crédito fue ratificado por el Congreso, bloqueando cualquier intento de la oposición. Desde el comienzo fue clara la estrategia del Gobierno porque al hacerlo por decreto evitó pasar por el Senado, donde el oficialismo tiene dificultades para reunir la mayoría y liquidó el asunto en Diputados donde con mayoría simple de los presentes se aseguraba el acuerdo.
El DNU autoriza al Gobierno a firmar operaciones de crédito público contenidas en el Programa de Facilidades Extendidas con un plazo de amortización de 10 años y con un período de gracia de cuatro años y seis meses. Si bien no se conocen detalles del programa, parte de lo que envíe el FMI será destinado a cancelar las letras intransferibles en dólares en poder del Banco Central y las operaciones de crédito público celebradas en el marco del Programa de Facilidades Extendidas de 2022 cuyo vencimiento opere dentro de los cuatro años de la suscripción del acuerdo.
Los cruces con los K, el reclamo de Pagano y el pico entre libertarios
La sesión se gestó en un clima de tensión por el reclamo del kirchnerismo y la oposición más dura de un proyecto que explique el programa de endeudamiento con el FMI. Incluso en la reunión de labor parlamentaria no hubo acuerdo para organizar debate y el oficialismo terminó acordando con los dialoguista un recorte en los discursos para garantizar que la votación se haga antes del comienzo de la marcha de los jubilados, dado el antecedente de los violentos disturbios que se produjeron la semana pasada.
En esa discusión hubo fuertes cruces entre las principales espadas de Unión por la Patria y Martín Menem. Germán Martínez apurando al riojano cuando le llamó la atención por el tiempo destinado a los oradores y el jefe del bloque K le gritó: “Vení a laburar. Quédate a laburar, porque después vos pedís respeto y después no lo cumplís”.
La tensión aumentó cuando en la Cámara de Diputados comenzó a circular un audio de WhatsApp en la que Menem ordena a su tropa que tensionen la sesión. “Los quiero a los gritos, puteándome, nada pacífico”, instruyó el riojano. Se mencionó a Mercedes Llano, Alvaro Martínez, Lisandro Almirón y Lilia Lemoine como los alborotadores, aunque en el debate sólo intervino el correntino.
Pero en un segundo audio, Menem advirtió a sus diputados que la oposición iba insistir con su pedido para que se ratifiquen las autoridades de la comisión de Juicio Político. Sobre este punto, el riojano aseguró tener un acuerdo con la Coalición Cívica para trabar la maniobra que viene empujando el kirchnerismo. Lo cierto es que esto provocó la reacción de la oficialista Marcela Pagano, que hace un año fue designada al frente de esa comisión pero el nombramiento no fue reconocido por el presidente de la Cámara. Un conflicto que ya lleva casi un año sin resolverse.
La batalla por el DNU: el discurso “incendiario” del oficialismo y la aparición de Máximo
La batalla por la defensa del DNU arrancó con el discurso del libertario Lisandro Almirón, quien en un encendido mensaje terminó cargando contra el kirchnerismo y pidiendo que Cristina Kirchner pida “perdón de rodillas” por lo que dejó su gestión. El mensaje fue cuestionado no sólo por los K sino también por Miguel Angel Pichetto, quien calificó como “incendiario” el discurso del oficialismo. Maximiliano Ferraro fue directo a reprocharle a Gabriel Bornoroni, jefe de LLA en la Cámara baja.
Mientras esto ocurría, Almirón cerraba su intervención pidiendo perdón a Oscar Zago, el jefe del MID y a quien sacó del recinto la semana pasada a las trompadas. “Zago, ¿querés que te dé un pico?”, expresó con ironía Almirón. Después hubo besos, abrazo, sonrisas y reconciliación entre los oficialista. A cambio, Zago, jefe del MID, se llevó la presidencia de la importante bicameral de Trámite Legislativo, que en un debate exprés sacó despacho este martes por el DNU del acuerdo con el FMI para que se trate al día siguiente en el recinto.
Hubo algunos discursos llamativo como el de Rodrigo de Loredo, jefe de la UCR, quien justificó el apoyo de su bloque diciendo que es para “ayudar a un Gobierno que no integra, en un momento crítico, como lo hizo con Alberto Fernández”. El cordobés aclaró que el Gobierno “gana tiempo valioso” con este nuevo programa, pero advirtió que “no resuelven el fondo de la cuestión”.
De Loredo apuntó que la Argentina fue 22 veces al Fondo Monetario y según su interpretación es la “absoluta evidencia de que no es un fin ir al FMI”. “Vamos al Fondo porque no tenemos dólares, porque estamos flacos de dólares y están flacas las reservas”, concluyó.
Por su parte, Juan Manuel López remarcó que “es la primera vez” que la Coalición Cívica ratifica un DNU. “No estamos orgullosos de eso. Sabemos que no es la herramienta ideal. Es responsabilidad porque este acuerdo con el Fondo también lo tomó el gobierno que apoyamos, entonces somos responsables a lo largo de los años y queremos que esto se solucione”, fundamentó.
Desde Unión por la Patria, Maximo Kirchner advirtió que este acuerdo “va a fracasar” y acusó a los diputados de querer “sacarse el problema de encima”. “Tenemos que contar formas en que nuestro país pueda pagar, así no va a poder pagar nunca y mientras más tiempo transcurra sin poder pagar más agarrados del pescuezo nos van a tener”, dijo.
“Lo que está haciendo este Congreso hoy es darle a una persona que no puede identificar una estafa a dos centímetros de su nariz plenos poderes en un acuerdo que ningún argentino y argentina conoce para poder avanzar”, remató el jefe de La Cámpora apuntando contra el Presidente por el escándalo de la criptomoneda $LIBRA.