El director médico de la Clínica Olivos, donde Diego Armando Maradona (60) estuvo ocho días internado tras ser operado de un hematoma subdural, afirmó este martes que al paciente “no le iba a ir muy bien” en una internación domiciliaria para tratar sus excitaciones psicomotrices, opción que, según él, primero fue aceptada y luego descartada por los médicos tratantes y la familia del Diez.

La décima quinta audiencia del debate que busca determinar las responsabilidades médicas por la muerte de Maradona contó con la presencia de la psiquiatra Agustina Cosachov, una de las ocho personas imputadas en la causa, siete de las cuales están siendo juzgadas en este proceso. También asistieron, como en todas las jornadas realizadas hasta el momento, el médico clínico Pedro Di Spagna y el coordinador de la prestadora Medidom SRL, Mariano Perroni.

Jana Maradona también presenció la declaración de Dimitroff (56), quien es el director médico de la Clínica Olivos desde 2008 y participó en las cuatro internaciones de Maradona en ese centro de salud, bajo el seudónimo “Ariel Gómez”, para no ser reconocido.

Ante los jueces Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 3 de San isidro, Dimitroff aseguró que mantuvo al menos cuatro reuniones con los médicos tratantes del paciente, Leopoldo Luque y la propia Cosachov, para coordinar las acciones posteriores a la externación del paciente.

La salida de Maradona de la Clínica Olivos tras la intervención. Foto: Juan Manuel Foglia.La salida de Maradona de la Clínica Olivos tras la intervención. Foto: Juan Manuel Foglia.

El martes 3 de noviembre de 2020 Maradona fue trasladado a la Clínica Olivos para operarlo de un hematoma subdural. Ingresó y a las dos horas y media ya estaba realizado el post quirúrgico.

A su vez, el testigo que, una vez ingresado a la clínica, a Maradona se le realizó un laboratorio prequirúrgico, un estudio de Covid y que en el quirófano se hizo un laboratorio para el egreso. También dijo que Luque llevó una fotografía de la tomografía que le habían practicado en el Sanatorio Ipensa de La Plata.

“En mi opinión no era una urgencia lo que teníamos por delante”, explicó en un primer momento y luego sostuvo que “era lógico” el pedido de Luque de operarlo, ya que podría restar vinculado a las conductas que mantenía el ex futbolista en los días anteriores.

Dimitroff relató que al día siguiente de la intervención Maradona “estuvo bastante bien”, pero aclaró que se trataba de “un paciente que no era fácil mantenerlo en la cama”. Recién entre los días 5 y 6 “hubo un cambio notable” dado que sufrió un episodio de excitación psicomotriz por abstinencia.

“En ese momento primero hablamos con los médicos que tenían al paciente a cargo, que eran Luque y Cosachov. Ahí se nos blanqueó que esta dificultad era parte de un problema que ya tenía en el domicilio. Fue a partir de esa situación que nosotros abrimos una nueva instancia, más compleja de lo que habíamos tratado”, detalló.

Ante esta situación se realizó una reunión con los jefes de la terapia intensiva, la familia del Diez y los médicos “para decirles que era una situación compleja y contarles como era la recuperación de un paciente que estaba excitado, que era difícil de manejar”.

“Fue la primera vez que hablamos en general de que era un paciente complicado para llevárselo nuevamente al domicilio. Fue aceptada y planteada como una preocupación de la familia y del cuerpo médico tratante. ´Nos cuesta muchísimo manejarlo en la casa´, nos dijo el cuerpo medico. Lo mismo las hijas, que no podían verlo ni comunicarse”, recordó.

Entre el viernes 6 y el sábado 7 de noviembre de 2020 Maradona estuvo sedado. “Luque y Cosachov pedían la sedación”, afirmó el jefe médico y remarcó que “es algo que no puede ser permanentemente” y que “no estaba claro el plan de parte de ellos de cómo continuar el tratamiento”.

Maradona almorzando, pocos días antes de su muerte. Una foto que el médico Leopoldo Luque sumó a su declaración.Maradona almorzando, pocos días antes de su muerte. Una foto que el médico Leopoldo Luque sumó a su declaración.

Por su parte, el fiscal general adjunto de San Isidro Patricio Ferrari mostró un chat del miércoles 4 de dicho mes –a menos de 24 horas de ser operado Maradona-, en el que Cosachov le planteó a una coordinadora de Swiss Medical los requerimientos para una internación domiciliaria.

“Entiendo que Cosachov estaba planteando que el paciente iría a un domicilio. Claramente, luego del evento de excitación psicomotriz y evento de abstinencia nos puso en otro lugar”, explicó.

Dimitroff indicó que Maradona “no cumplía con la toma de medicación, no se levantaba de la cama, estaba despierto de noche y despierto de día”.

“Nos parecía que el domicilio no era el lugar adecuado para la continuidad del tratamiento que había iniciado en la Clínica Olivos. Para mi había que llevarlo a un lugar para rehabilitar y que tenga control que consumía y que no. En un domicilio al paciente no le iba a ir muy bien”, consideró.

Una nueva reunión

El lunes 9 hubo una nueva reunión entre las autoridades, los médicos tratantes y la familia del Diez. Desde la Clínica Olivos se planteó la idea de continuar la rehabilitación del paciente en un centro especializado. “Creíamos que era la única salida adecuada para encargarse de su rehabilitación motriz, sacarlo del consumo regular de tóxicos y ocuparse de las consecuencias de la abstinencia”, detalló Dimitroff.

El testigo afirmó que “la primera recepción fue muy favorables de ambas partes” y agregó que en ese momento Luque dijo ´es genial que podamos hacer algo así´.

“Plantee una limitante que son lugares donde pueden estar en internaciones contra su voluntad. Necesitábamos como elemento primordial que aceptara la derivación. Luque nos dijo que es imposible porque no quiere otra cosa que irse a su casa”, declaró.

El barrio San Andrés de  Benavidez, en el que murió Maradona. Foto Julio Sanders.El barrio San Andrés de Benavidez, en el que murió Maradona. Foto Julio Sanders.

De acuerdo al testigo, ese mismo día, horas más tarde y luego de una reunión entre la familia y los médicos tratantes, informaron a las autoridades de la Clínica Olivos que no iban a aceptar la propuesta.

“El mismo 9 nos plantearon que no iban a tomar la opción de la derivación, que querían armar algo en el domicilio. En la mañana del 11, de manera intempestiva, nos dijeron que consiguieron el lugar y nos pidieron una ambulancia para hacer el traslado. Cosachov nos pidió todo para el traslado. Se arregló en una tercera reunión, el mismo 11, para dejar todo arreglado”, recordó Dimitroff.

Maradona fue externado ese mismo día y llevado en una ambulancia a una casa del lote 45 del barrio privado San Andrés, de Benavídez, donde murió dos semanas después.



Fuente Clarin.com

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