En los últimos 20 días, el precio de la soja subió un 12% en Rosario, y las lluvias presagían una mejor cosecha gruesa. Pero pese a la alegría del Gobierno, que contribuyó a un mejor escenario con la baja parcial y temporaria de las retenciones, los ruralistas agradecen pero van por más, por todo lo que falta para que el motor productivo tenga un dinamismo pleno.
Esas sensaciones se plasmaron en el Acta Acuerdo firmada al cierre de la 11° edición de la Mesa Triguera Nacional, realizada este jueves en Leones, Córdoba, con la presencia de funcionarios nacioanles, provinciales y dirigentes ruralistas.
Estuvo el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, entre otros directivos que se manifestaron en un consenso sectorial avalado por las firmas de los presentes.
Entre los principales ejes abordados durante la reunión, se pidió “eliminar los derechos de exportación que desalientan la producción. La baja de retenciones debe continuar y no ser temporaria. Tener previsión en las acciones. El equilibrio fiscal real es sin retenciones y sería necesario que fuera por ley”.
Esto lo solicitaron las entidades agropecuarias del sector privado y los funcionarios públicos provinciales. Quizás Iraeta no dio su aval explícito porque recordó que cuando sus antecesores en Agricultura, Pedro Vigneau y Germán Di Bella, firmaron en el mismo evento, el año pasado, un pedido similar para bajar las retenciones -coherentes con lo que habían sostenido durante años- fue un factor de peso para que poco tiempo después desde Economía les pidieran las renuncias como estrechos colaboradores del ex secretario Fernando Vilella.
En el documento quedaron plasmados 7 acuerdos, 17 pedidos y 6 propuestas de trabajo, con los cuales coincidieron las instituciones y representantes de los sectores privados.
El espíritu central del encuentro fue “fortalecer la participación comprometida de diversas instituciones del sector público y privado, alcanzando a todos los sectores de la cadena agroindustrial del cultivo del trigo que permita construir entre todos una agenda de trabajo, aspirando a que estos lineamientos sean un compromiso de una política de Estado y una política empresaria a largo plazo y de alto impacto para la sociedad en su comunión con lo urbano y rural.
Otros acuerdo fueron los siguientes: