El testimonio de la madre de uno de los sospechosos fue la clave para identificar y lograr detener a uno de los acusados de asesinar a Luis Antonio Ramos, un jubilado de 78 años que fue maniatado, amenazado y golpeado hasta que murió por el ataque de cuatro ladrones en su casa del barrio San José de Lomas de Zamora.
La mujer, madre de unos de los investigados que tiene apenas 14 años y varios ingresos a comisarías, declaró que cerca de la medianoche del viernes tres jóvenes fueron a su casa para buscar a su hijo. Llegaron en un Volkswagen Suran color rojo.
“Voy a tomar algo”, le dijo su hijo adolescente. Cerca de las seis de la madrugada volvió a la casa. Dos horas antes, tres de los jóvenes habían ingresado a la casa de un matrimonio de jubilados, a quienes amenazaron, ataron y asesinaron a golpes. Los investigadores creen que su hijo no participó del hecho.
La descripción que aportó de mujer fue clave para identificar a uno de los imputados: el muchacho tenía una renguera que quedó expuesta en su caminar al ser captado por una cámara de seguridad.
Detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora realizaron cinco allanamientos y lograron dar con uno de los sospechosos, de apellido Reyes, de 23 años. En tanto, hay otros dos identificados.
La fiscalía tomó intervención en el caso y la policía montó un operativo encubierto para dar con los acusados del homicidio. Fue entonces que un vehículo llegó a la casa de Reyes.
El auto en cuestión era de una aplicación de viajes. Reyes salió de la vivienda con un bolso. Subió al vehículo y emprendió el recorrido. Personal policial siguió al vehículo hasta que lo interceptó y detuvo al joven.
“Se iba a tomar el palo con un bolso en un remis”, dijo a Clarín un investigador.
Fuentes policiales confirmaron que Reyes tiene antecedentes penales por distintos delitos como encubrimiento agravado, robo agravado en poblado y banda, robo con escalamiento y uso de arma.
Durante los allanamientos se secuestraron vestimentas que fueron utilizadas al momento del crimen y también teléfonos celulares.
En el apartado de la madre de otro de los sospechosos se encontraron fotos donde el acusado exhibía grandes sumas de dinero. Se cree que se fugó luego del crimen.
En tanto, la pareja del tercer implicado declaró que por la mañana su novio se fue a trabajar a la Capital Federal. Los policías continúan buscándolos.
Ramos estaba durmiendo en su casa junto a su esposa, Juana Flecha (76), cuando fueron sorprendidos en medio de la madrugada por tres jóvenes en su casa de la calle La Calandria al 3200, de la localidad de San José, en Lomas de Zamora.
Fuentes de la investigación detallaron a Clarín que tres asaltantes ingresaron por la ventana del comedor a la casa. Llevaban puestos guantes y barbijos para no ser reconocidos.
Uno de los delincuentes fue hasta donde estaba Ramos y lo redujo. Lo maniató mientras le exigía dinero en efectivo. En otro lado de la casa, los otros asaltantes amenazaban a la mujer.
En un momento, el ladrón que estaba con Ramos agarró un objeto y lo golpeó en la cabeza. A raíz de la agresión, el hombre cayó desvanecido, inconsciente. Los sospechosos se escaparon de la propiedad con mil dólares, 900 euros y más de 300 mil pesos. Cuando llegó la ambulancia constató la muerte del dueño de la casa.