cuáles son las mejores opciones para principiantes y expertos

El verano y el calor invitan a las personas a visitar lugares con piletas, ideales para refrescarse, combatir las altas temperaturas y realizar un poco de actividad física de forma simultánea. Ante esto, los deportes acuáticos toman una mayor relevancia durante esta época del año. En detalle, cuáles son las opciones para principiantes y para expertos.

Desde actividades tranquilas como la natación hasta otras que requieren de una mayor preparación como el rafting, todas ellas traen grandes beneficios para el organismo y para la salud.

Por ejemplo, hacer natación durante una hora permite quemar entre 570 y 1.000 calorías por hora aproximadamente, siempre dependiendo del estilo (el que menos quema es el estilo libre lento, con 572-651 calorías por hora, mientras que el más demandante es la mariposa, con 899-1.024 calorías por hora).

La natación es quizás la más accesible para todos, ya que se puede hacer tanto en el gimnasio, como en la pileta del hogar, lagos o en el mar. Tampoco se requiere una preparación profesional previa, ya que simplemente hay que saber mantenerse a flote en el agua y perfeccionar las técnicas para aprovechar al máximo sus beneficios. Además, es una actividad de bajo impacto, ideal para personas de todas las edades.

A su vez, el esnórquel permite a los principiantes explorar la vida marina sin necesidad de formación previa. Únicamente se necesita un equipo básico de máscara, snorkel y aletas, que suelen otorgar las empresas que ofrecen esta actividad.

Una que no requiere mucho esfuerzo físico, pero sí mental, es la yoga dentro del agua. Esta actividad estimula la relajación y se puede hacer sin problemas en piletas o mismo en la playa, y es apto para personas de todas las edades. De hecho, es muy recomendada para un mejor funcionamiento de los huesos y músculos de los adultos mayores, como también para fomentar una mayor conexión entre el cuerpo y la mente.

En cambio, hay otros deportes acuáticos que son para personas preparadas física y técnicamente. Por ejemplo, el kayak se considera una actividad de nivel intermedio, ya que requiere de una técnica precisa para mover el bote, pero no es necesaria una destreza física muy alta. Similar al kayak, el piragüismo se realiza en canoas y puede practicarse en aguas tranquilas o en ríos con corriente.

Una de las que requiere habilidad, técnica y destreza física es el windsurf, un deporte acuático que combina navegación y surf. Se lleva a cabo en aguas tranquilas, pero requiere de un fuerte viento para el movimiento. Este trabajo mejora la fuerza de los músculos y la resistencia cardiovascular.

Uno medianamente similar es el kiteboarding, una combinación de surf y vuelo, en la que las personas son llevadas por una cometa sobre el agua.

Finalmente, uno muy popular en los últimos años es el buceo. Para esta actividad se requiere sí o sí una preparación previa, con cursos teóricos y prácticos de varias horas junto a profesionales, sumado a un examen final y una prueba bajo el agua para ver si la persona está realmente preparada para salir a las aguas abiertas.