Los artistas españoles Miquel Barceló, Cristina Iglesias y el mexicano Javier Marín realizarán la propuesta artística para la fachada de la Gloria que se está empezando a construir en la Sagrada Familia de Barcelona, una obra maestra del modernismo que es uno de los monumentos más visitados de España.
Según informó la Basílica de la Sagrada Familia, el Patronato de la Junta Constructora ha escogido a este trío de artistas para que hagan una propuesta sobre cómo debería ser el diseño del que será el principal acceso al templo católico que proyectó el arquitecto español Antoni Gaudí (1852-1926), uno de los genios del modernismo.
Las creaciones de Barceló, Iglesias y Marín “servirán para que el Patronato pueda seleccionar al artista o a los artistas que finalmente llevarán a cabo su ejecución”, añadió la entidad gestora, sin descartar que se combinen propuestas.
La fachada de la Gloria es la última que queda por construir y será la principal del templo barcelonés, la que estará orientada al mar. Estará dedicada a explicar la historia de la humanidad desde Adán y Eva hasta el juicio final, así como las enseñanzas de Jesús, explica el templo.
Actualmente, lo esfuerzos en la construcción están centrados en la torre de Jesús, la más alta de la Sagrada Familia y que contará con una cruz mirador en la cima.
Esta torre se prevé culminar al final de este año para ser inaugurada en junio de 2026, coincidiendo con los actos del centenario de la muerte de Antoni Gaudí.
En paralelo, la Sagrada Familia ha iniciado este año la construcción vertical de la fachada de la Gloria, el acceso principal.
De momento, de la fachada de la Gloria solo están puestos los fundamentos, sobre los que se alzarán cuatro torres, junto con el resto de los elementos arquitectónicos, durante los próximos años.
Para la fachada está previsto en el futuro una extensa decoración, que contará con un centenar de figuras.
La basílica comenzó a erigirse en 1882 y su construcción se financia con donaciones. La parte que llegó a construir el propio Gaudí fue declarada en 2005 patrimonio de la humanidad por la Unesco.
Nacido en 1962 en el estado de Michoacán, Javier Marín ha realizado proyectos en espacios religiosos como la iglesia de San Agustín en Pietrasanta, en Italia, el Convento de San Francisco de Asís, en La Habana, y la Catedral Basílica de Zacatecas, en México.
Por su parte, el mallorquín Miquel Barceló es a los 68 años uno de los artistas contemporáneos españoles más famosos. Recientemente fue seleccionado para diseñar un tapiz para la catedral de Notre Dame en París, y es autor de un mural en una capilla de la catedral de Palma de Mallorca.
Finalmente, Cristina Iglesias, artista vasca de 68 años, ha representado a España en dos ocasiones en la Bienal de Venecia. Entre sus proyectos de arte público destacan las puertas de la ampliación del Museo del Prado, en Madrid, y la fuente de la plaza Leopold de Wael, en Amberes, Bélgica.
Con información de EFE y AFP.