Lo que se sospechaba, ocurrió: en agosto la inflación volvió a tener una disparada y alcanzó el 12,4 por ciento, así acumula un 80,2 por ciento en los primeros ocho meses del año. El número llega después de la devaluación del dólar oficial que realizó el gobierno nacional tras las elecciones primarias, medida a la que Sergio Massa se refirió como “obligatoria” para que el Fondo Monetario Internacional realice desembolsos hasta fin de año.
En junio, la inflación había sido del 6,3 por ciento. La cifra de agosto es la más alta desde 1991.
Dónde estuvieron los mayores aumentos
Según el organismo que conduce Marco Lavagna, la categoría donde se registraron mayores aumentos fue Alimentos y bebidas no alcohólicas, en donde pegó de lleno la devaluación que resolvió Economía. Esta categoría -que es la que mayor implicancia tienen en la canasta básica- creció un 15,6 por ciento, seguida muy de cerca por Salud, que aumentó 15,3 por ciento.
A su vez, alimentos y bebidas no alcohólicas aportó la mayor incidencia sobre la variación mensual en todas las regiones del país. Por encima -o igual- de la inflación general también estuvieron rubros tales como Equipamiento y mantenimiento del hogar (14,1%) y Restaurantes y hoteles (12,4%)
Noticia en desarrollo