Inaugurado en Shanghai el pasado mes de abril, el pasado 11 de octubre Gucci Cosmos abrió sus puertas en Londres en el espacio 180 Studios, 180 The Strand, consolidando la relación entre la Maison y la capital del Reino Unido. Fue precisamente en la ciudad inglesa donde, en 1897, Guccio Gucci encontró trabajo como portero y ascensorista en el Hotel Savoy, transportando el equipaje de los huéspedes del hotel en una experiencia que le dio al joven Guccio la oportunidad de conocer los gustos. de la élite internacional que cada día pasaba por las famosas puertas giratorias o utilizaba el ascensor para llegar a sus habitaciones. Inspirado por esta aventura, en 1921 Gucci regresó a Florencia para fundar su negocio de artículos de cuero del mismo nombre, al que siguió la inauguración de la primera tienda de la marca en Via della Vigna Nuova.
La vida y el legado estilístico de Guccio Gucci son la base fundamental de Gucci Cosmos, una exploración de la historia de la Maison a través de las visiones que la han hecho grande a lo largo de los años. Gracias al trabajo de la artista británica Es Devlin y la crítica de moda María Luisa Frisa, la exposición transita entre el pasado, presente y futuro de la marca, ofreciendo a los visitantes la visión de algunos tesoros reales, muchos de los cuales nunca antes habían sido vistos. procedente del Archivo Gucci.
Desde la ambición de su fundador Guccio Gucci, hasta el espíritu revolucionario de sus hijos Aldo y Rodolfo, pasando por el trabajo de los diseñadores que hicieron grande la marca: Tom Ford, Frida Giannini, Alessandro Michele y ahora Sabato De Sarno. Según cuenta María Luisa Frisa, lo que hace única esta experiencia es su capacidad de transformarse en función de los espacios que ocupa y del ambiente de la ciudad que la acoge, contando así cada vez una faceta diferente de la vida de la marca.
Cortesía de Gucci
Antes de Londres, sin embargo, estaba Florencia. Es por eso que Gucci Cosmos comienza con un homenaje a un símbolo de las glorias arquitectónicas de la ciudad toscana, la cúpula de Santa María del Fiore, reproducida en la fachada exterior del edificio. A partir de ahí, la exposición recorre la historia de la marca a través de la exploración de sus elementos más famosos: el equipaje en todas sus formas y variaciones temporales, pero también el Horsebit y los diversos símbolos ecuestres de la Maison. No falta el famoso traje de terciopelo rojo creado por Tom Ford en 1996, así como uno de cuadros ceñido a la cintura firmado por Frida Giannini y varias creaciones de Alessandro Michele, incluida una de su colección Twinsburg 2022.
Sin embargo, sigue siendo imposible contener en un solo artículo todas las maravillas que se exponen en los espacios de Gucci Cosmos, un viaje que recorre la narrativa de la Maison y concluye inevitablemente en el interior de “Gucci Ancora”, la sala inspirada en la primera colección de la nuevo director creativo Sabato De Sarno. Decorado íntegramente en el nuevo Rosso Ancora, el espacio pretende ofrecer una mirada a la nueva dirección creativa de la Maison sin olvidar el pasado que la hizo posible.