Las ventas minoristas de las pymes no se recuperan y volvieron a caer por noveno mes consecutivo en septiembre al retroceder 5,1 por ciento interanual, de acuerdo al informe elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). En el acumulado de los primeros nueve meses del año la baja es del 2,6 por ciento frente al mismo período del año pasado. En tanto, en el contraste intermensual, las ventas descendieron 1,1 por ciento con relación a agosto.

Desde la entidad empresaria indicaron que “hasta la fecha, el mes de septiembre fue el de peor desempeño del año”. “El consumo acusó la pérdida del poder adquisitivo familiar derivado de las fuertes subas de precios. Mientras las políticas de ingresos lanzadas por el Gobierno no alcanzaron a contener la caída en la demanda. Hubo menos opciones de financiamiento en cuotas y eso revirtió decisiones de compra, especialmente en bienes de mayor valor”, agregaron.

El Índice de Ventas Minoristas Pymes arrojó que dos de los sectores más afectados en el mes fueron Alimentos y Bebidas, con una contracción de 8,1 por ciento anual y Farmacias con una contracción del 12,3 por ciento. Desde la CAME aseguraron que “el declive de esos rubros básicos, confirman la difícil coyuntura que atraviesa la actividad comercial”.

Seis de los siete rubros relevados registraron caídas interanuales en sus ventas. La mayor retracción ocurrió en Farmacia con una caída de 12,3 por ciento y el segundo lugar quedó Alimentos y bebidas con un retroceso de 8,1 por ciento. El único rubro en alza fue Calzado y Marroquinería con una mejora de 4,3 por ciento. En el acumulado del año, Farmacias (+3,2 por ciento) y Calzado y marroquinería (+0,5 por ciento) son los únicos que experimentan crecimiento.

El rendimiento de cada rubro.

-Alimentos y bebidas: las ventas descendieron un 8,1 por ciento anual en septiembre, a precios constantes y acumulan una baja del 2,6 por ciento en los primeros nueve meses del año frente al mismo periodo de 2022. En la comparación intermensual disminuyeron 1,6 por ciento. “El consumo acusó la pérdida del poder adquisitivo familiar derivado de las fuertes subas de precios. Mientras las políticas de ingresos lanzadas por el Gobierno no alcanzaron a contener la caída en la demanda. Hubo menos opciones de financiamiento en cuotas y eso revirtió decisiones de compra, especialmente en bienes de mayor valor”, informó CAME.

-Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles: el declive fue del 1,2 por ciento anual en septiembre y suma un retroceso del 1,9 por ciento en los primeros nueve meses del 2023, contra el mismo periodo del año pasado. En la comparación intermensual, subieron 2,4 por ciento. CAME remarcó que “el rubro viene desde hace muchos meses con bajos niveles de ventas, manejándose principalmente con productos nacionales, y económicos. El aumento de precios del mes alejó al público, y desde los negocios consultados contaron que por momentos se quedaron sin mercaderías porque los proveedores especulan y no entregan”.

-Calzado y marroquinería: las ventas ascendieron un 4,3 por ciento anual en septiembre, siempre a precios constantes, y registran un aumento de 0,5 por ciento en los primeros nueve meses, en relación con el mismo periodo de 2022. En la comparación intermensual subieron 3,5 por ciento. “El sector arrancó su temporada alta, y este año con anticipación por las agradables temperaturas que se arrastran desde agosto, lo que apresuró ventas de calzado primaveral. En algunas tiendas señalaron que es posible que se hayan anticipado compras del Día de la Madre, para cubrirse de próximos aumentos”, destacó CAME.

-Farmacia: las ventas se desplomaron 12,3 por ciento anual en septiembre, sin embargo, aún acumulan un crecimiento de 3,2 por ciento en los primeros nueve meses del año, siempre comparado con igual periodo de 2022. En relación con el mes pasado, bajaron 9,9 por ciento. “Fue un mes muy malo para el rubro, no solo por los bajos niveles de ventas si también por la caída de los márgenes de ganancias. No se consiguen drogas, faltan medicamentos, hay compras que los clientes deben encargar y buscar a hasta cinco días después”, remarcó CAME.

-Perfumería: registró un declive del 1 por ciento anual, y también acumula una caída de 1 por ciento en los primeros nueve meses del año frente al mismo periodo de 2022. En la comparación con agosto las ventas subieron 1,1 por ciento. CAME sostuvo que “se vendió poco y productos de bajo valor. En las tiendas manifestaron que no se consiguen cremas dermatológicas, y que las altas tasas que cobran las tarjetas por financiamiento en cuotas frenan las ventas. Además, con las últimas subas del dólar los productos importados quedaron muy costosos y no tiene salida. De todos modos, los empresarios son optimistas de repuntar las ventas en octubre, por el Día de la Madre”.

-Ferretería, materiales eléctricos y materiales de la construcción: las ventas cayeron 3 por ciento anual en septiembre, a precios constantes y llevan así una baja de 1,1 por ciento en los primeros nueve meses de la temporada, en relación con el mismo al mismo periodo de 2022. En cambio, contra agosto subieron 2,1 por ciento. “La cercanía de fin de año en un mercado que no se reactiva está generando incertidumbre en los comercios del sector, que están siendo muy prudentes al estimar el stock para los próximos meses”, señaló CAME.

-Textil e indumentaria: las ventas bajaron un 1,9 por ciento anual en septiembre, y hasta ahí llevan una caída de 7,3 por ciento, siempre contrastado con el mismo lapso de 2022. En relación con el mes pasado descendieron 0,6 por ciento. “Lo que mejor se vendió fue la ropa deportiva, pero no en los niveles previstos para el mes. Algunos comercios dudan si anticipan compras o no, por temor a no poder vender la mercadería. Las subas de precios achicaron los márgenes de ganancias porque hasta el momento del relevamiento, los empresarios señalaron que no pudieron aun trasladar todo al cliente”, concluyó CAME.



Fuente-Página/12