Más de 30 estados de Estados Unidos presentaron este martes una demanda contra Meta, la empresa matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp, por “engañar repetidamente al público sobre los peligros de sus plataformas” y “por inducir a sabiendas a niños y adolescentes a un uso adictivo y compulsivo de las redes sociales”.
“Meta aprovechó tecnologías potentes y sin precedentes para atraer, captar y, en última instancia, atrapar a niños y adolescentes, bajo el móvil del lucro”, dice la denuncia, que busca frenar el impacto de las redes sociales en la salud mental de este grupo etario y obligar a Meta a cambiar las características de sus redes.
Según informaron medios locales, 33 estados, entre ellos Colorado y California, presentaron una demanda conjunta en un tribunal federal del Distrito Norte de California, mientras que otros fiscales generales de Washington D.C. y 8 estados están presentando denuncias separadas en tribunales federales, estatales o locales.
Meta, lejos de hacer autocrítica, respondió que las autoridades de la compañía están “decepcionadas” por las demandas recibidas. “Nos decepciona que, en lugar de trabajar de forma productiva con empresas de todo el sector para crear normas claras y adecuadas a la edad para las numerosas aplicaciones que utilizan los adolescentes, los fiscales generales hayan elegido este camino“, señaló la empresa.
Una investigación de 2021 que puso la lupa sobre Meta
La mayoría de las demandas presentadas tienen su origen en una investigación de 2021 sobre las distintas maneras en que Meta -según se denuncia- contribuye a crear o potenciar problemas de salud mental entre los jóvenes.
Ese año, The Wall Street Journal detalló en un reportaje elaborado con información interna cómo Instagram empeoraba la percepción de los usuarios -sobre todo niñas y adolescentes- sobre sus cuerpos, y señaló que la compañía era consciente de este problema.
Desde entonces, algunos estados como Arkansas y Utah han aprobado leyes que prohíben el acceso de los niños menores de 13 años a las redes sociales y exigen que los adolescentes menores de 18 años obtengan el consentimiento de sus padres para acceder a los sitios.
California, en tanto, aprobó leyes que exigen que las empresas tecnológicas examinen sus plataformas en busca de posibles riesgos y problemas.
TikTok, de ByteDance, y YouTube, de Google, también han sido objeto de cientos de demandas presentadas en nombre de niños y distritos escolares por el carácter adictivo de sus plataformas.