Más de un centenar de armas de guerra y seis granadas –dos de mano y cuatro proyectiles de mortero–, conforman el arsenal encontrado por bomberos de la Ciudad que acudieron a apagar un principio de incendio, en un departamento del barrio porteño de Palermo, el miércoles por la noche. Los dueños de la propiedad, ubicada en el piso 16 de Salguero 2244, titulada a nombre de la familia Mochkovsky –fundadora de la emblemática casa de juegos electrónicos Sacoa, en los años ’70–, no se encontraban en el lugar. Y fue tras dominar el incendio que la cuadrilla del Cuartel Recoleta de bomberos dio con la habitación donde estaban las armas.
Las dos granadas de mano que según constató la investigación estaban activas y conservan inscripciones de vieja data: en una puede observarse el distintivo de la organización Montoneros, y en la otra la insignia de la fábrica ilegal de armas Sabino Navarro que pertenecía a esta misma organización. La hipótesis de mayor firmeza refiere a que se trata de un arsenal perteneciente a un coleccionista.
El extraño hallazgo se produjo cuando los bomberos acudieron por una alarma de incendio, informada por los vecinos ante el fuego que se iniciaba en el lugar. Mientras trabajaban en el departamento –al que costó ingresar por tener su puerta blindada–, hallaron las armas y dieron aviso a la Comisaría Vecinal 14 A y al Escuadrón Antibombas de la Policía de CABA. Había más de 70 armas cortas y largas y 21 fusiles que se entregaron a la División Investigaciones de Armas de Fuego y Explosivos de la Policía de la Ciudad.
“Hubo una evacuación del edificio y perimetral, para el trabajo del Escuadrón Antibombas”, confirmó el Ministerio de Seguridad de CABA a Página/12, pero este viernes el barrio ya había recuperado su funcionamiento habitual. Mientras en la investigación interviene la Unidad de Flagrancia Norte, a cargo de Norberto Brotto, y el auxiliar fiscal Matías Vila ordenó que la pesquisa fuera seguida por el Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado, junto con la División Investigaciones de Armas de Fuego de la fuerza porteña.
Según explicó el comisario Matías García, a cargo del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado, “el incendio se originó por un desperfecto eléctrico” y una vez controlado, los bomberos encontraron el arsenal en una de las habitaciones. También detalló que muchas de las armas “son de uso prohibido” y estaban almacenadas en un lugar que no tenía las condiciones necesarias para su resguardo.
“Cuando concurrimos al lugar, notamos que había seis granadas, además de las armas de fuego, por lo cual en el día de ayer se procedió a la evacuación de todo el edificio, parte de la cuadra y se estableció un perímetro”, agregó García. Y precisó: “Hay más de 90 armas, algunas de uso prohibido como un bastón que dispara cartuchos de escopeta, tres silenciadores, y de las seis granadas hay dos de fabricación irregular, específicamente una que tiene la leyenda ‘Montoneros’ y otra ‘Fabrica Sabino Navarro’, que aparentemente estaban activas pero fueron inactivadas por el Escuadrón Antibombas”.
En el primer recuento se contabilizaron “54 armas de puño y 21 fusiles –detalló el comisario–, hay vainas, fulminantes, puntas, y máquinas para fabricar municiones de varios calibres”. Entre ellas, las de calibre 22 a 45, y “de 762 como las que utilizan los FAL”. Faltaba todavía “abrir las cajas fuertes que, ante la posible presencia de material explosivo en su interior”, se estaban tomando las medidas preventivas necesarias para hacerlo. Asimismo, el comisario a cargo del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado señaló que las armas “quedarán a disposición de la Fiscalía, que investigará su origen”. Para esto, ya fueron remitidas a la Policía científica de la Ciudad.
Por su parte, el subcomisario Martín Ledesma, jefe de la División Desactivación de Explosivos de los Bomberos de Policía de CABA, explicó que luego de inspeccionar las seis granadas se constató que las dos de mano que fueron desactivadas eran “de fabricación irregular”, y por las características “estarían en óptimas condiciones de uso y conservación, aunque para confirmarlo se están haciendo las pericias, y las otras cuatro, de fusil, se verificó que no poseían carga, es decir, inertes”.
Ante tamaño hallazgo, y dado que el propietario del departamento no se encontraba en el lugar, la Policía realizó la consulta con el fiscal Matías Vila, quien dispuso la intervención la División Investigaciones de Armas de Fuego de la Superintendencia de Investigaciones.
Quien se presentó en nombre del propietario del departamento fue una apoderada con el título de propiedad del inmueble. La mujer “quedó en investigación” confirmó a este diario el Ministerio de Seguridad de CABA. La Fiscalía en tanto investiga “el presunto delito de acopio de armas y tenencia ilegal de armas de guerra”. Mientras el departamento incendiado se mantiene con consigna por parte de personal policial.
El propietario del inmueble es el empresario Jorge Mochkovsky. El hombre, de 76 años, integró el directorio de Sacoa SA en los años ‘90. La popular cadena de locales de entretenimiento y videojuegos fue fundada por su padre, Mauricio Mochkovsky en 1969, con un primer local en el subsuelo de un edificio en Mar del Plata. Según fuentes periodísticas, el hermano de Jorge, Alejandro Mochcovsky, de 74 años quien reside en Mar del Plata, habría explicado que el departamento era utilizado por un sobrino que es “coleccionista de armas” y como vive en Estados Unidos sus abogados ya habrían avisado a las autoridades de su inminente viaje a la Argentina para esclarecer la situación. Aunque fuentes de la investigación detallaron a este diario que “según refirieron su apoderada y su abogado, el dueño estaba en Europa y no podían confirmar sobre el origen y la legalidad de todas las armas”.