Página/12 en Italia
Desde Roma
En el Día de la Memoria del Holocausto que la comunidad judía de todo el mundo y muchos países conmemoran el 27 de enero, miles de palestinos y simpatizantes de Palestina salieron a las calles este sábado en varias ciudades de Italia a pedir por la paz y contra el genocidio de parte de Israel.
Las autoridades italianas, que en principio habían autorizado estas manifestaciones, el viernes pidieron a los organizadores que las marchas fueran postergadas hasta el domingo, para evitar conflictos con la comunidad judía que podía sentirse ofendida.
El Día de la Memoria fue instituido en 2005 por Naciones Unidas y se celebra el 27 de enero porque ese día de 1945, los soldados de la Armada Roja, es decir de la Unión Soviética, liberaron el campo de concentración de Auschwitz, uno de los más terribles de la dictadura nazi. “Para mí el Día de la Memoria es todo el año”, declaró la senadora Liliana Segre, una de las pocas sobreviviente del campo de Auschwitz que ha dedicado su vida a recordar.
El homenaje del presidente
El viernes, el presidente de Italia, Sergio Mattarella, conmemoró el Día de la Memoria en el Palacio del Quirinale, sede de la presidencia, junto a miembros de la comunidad judía de Roma, la primera ministra Giorgia Meloni y exponentes del gobierno derechista. Según medios italianos, los miembros del gobierno no quedaron muy satisfechos con lo que dijo el presidente.
Mattarella, una persona muy respetada y antifascista, fue claro en su discurso, condenando entre otras cosas, las “leyes raciales” que impuso el dictador fascista Benito Mussolini y el exterminio de los judíos. “Los muertos de Auschwitz nos advierten continuamente: el camino del hombre procede por calles accidentadas y riesgosas. Lo manifiesta también el retorno en el mundo de peligrosos casos de antisemitismo”.
Mattarella luego hizo referencia a la situación en la franja de Gaza expresando su angustia por los “secuestrados en las manos crueles de Hamas”. Pero también manifestó la angustia que siente por las víctimas de la población palestina. Y en alusión a Israel añadió que “una reacción con consecuencias dramáticas sobre los civiles, arriesga de hacer surgir el resentimiento y el odio”. “Quienes han sufrido el detestable intento de cancelar al propio pueblo de la tierra (los judíos) saben que no se puede negar a otro pueblo el derecho a un estado”, concluyó el presidente.
El plan de dar a Palestina la posibilidad de crear su propio estado no es aceptada por Israel pese a que es una de las propuestas más difundidas y valoradas entre los países mediadores y miembros de Naciones Unidas. Otros personajes hicieron también referencia al Holocausto en el acto. “Nunca olvidar la maldad nazifascista y las leyes raciales”, dijo la primera ministra Meloni que se declara antifascista.
En la audiencia general del pasado miércoles, el Papa Francisco había dicho “que el recuerdo y la condena del horrible exterminio de millones de personas judías y de otras religiones nos ayude a todos a no olvidar que la lógica del odio y la violencia no se puede justificar porque niega nuestra propia humanidad”.
Las manifestaciones en Italia
Aunque la Corte Internacional de La Haya, a pedido de Sudáfrica, no dictaminó esta semana que Israel haya cometido un genocidio, le recomendó tomar todas las medidas para prevenirlo. Y los manifestantes palestinos y pro palestinos que este sábado manifestaron en Italia insistieron en pedir el cese de la guerra y del genocidio.
La palabra genocidio adquirió mucha más importancia en las manifestaciones de este sábado, porque el 27 de enero se conmemora el Día de la Memoria, es decir se recuerda el holocausto, el genocidio de los judíos. Y pese a que las autoridades italianas habían postergado las marchas pro palestinas del sábado para el domingo, muchos de los manifestantes salieron igual a la calle con actitudes pacíficas.
En la Piazza Castello de la ciudad de Turín los cientos de presentes hicieron una manifestación silenciosa, cubriéndose la boca con cintas adhesivas pero levantando cartelones con escritos como “Terminen con el fuego”, es decir la guerra. En Roma manifestaron más de 1.000 personas en Piazza Vittorio, muchos de ellos estudiantes y miembros de organizaciones sindicales levantando consignas como “Los genocidios son todos iguales”, “No estamos aquí para decir que estamos contra los judíos. Estamos aquí para decir no al genocidio de Gaza”.
Napolitanos contra el genocidio
En Nápoles, cientos manifestaron en la Piazza San Domenico Maggiore. Los manifestantes hicieron alusión al Holocausto pidiendo “Detengan el genocidio en Palestina”. Los organizadores publicaron un comunicado que dice: “Nuestra consciencia antifascista nos impone oponernos cotidianamente a cualquier recuerdo antisemita, racista y de extrema derecha -dijeron los organizadores de la manifestación en una nota difundida a la prensa- La memoria es un instrumento que sirve para que lo que ha ocurrido en el pasado no se repita más. El único modo que consideramos oportuno para honrar el Día de la Memoria es detener el actual genocidio en Palestina. En 1945 se dijo claro y los decimos hoy de huevo: “Nunca más, para nadie, en ningún lugar”.
En Piazzale Loreto de Milán, cerca de mil palestinos y pro palestinos manifestaron pese a que la asociación Palestinos en Italia había aceptado la postergación para el domingo pedida por el gobierno. La policía rodeó la zona tratando de imponer bloqueos.
Poco después del comienzo de la guerra entre Israel y Palestina, los palestinos de Italia decidieron reunirse cada sábado para manifestarse en Piazzale Loreto. Según medios de prensa italianos, Layla, de la asociación Jóvenes Palestinos, declaró que “la prohibición de hoy (a movilizarse) ha agregado un nuevo motivo para estar presente. El Día de la Memoria se vacía de significando si no miramos el presente y el futuro”.